El pasado de Carlos Rico fue varias veces revisado, más aún, cuando el ex gobernador justicialista Celso Jaque lo nombró como subsecretario de Seguridad durante los primero meses de su gestión. Rico “recibió felicitaciones de Santuccione y formó parte del G.E.S (Grupo Especial de Seguridad) en el año 1978. En el mismo lapso de tiempo, según el Movimiento Ecuménico de Derechos Humanos fueron secuestradas alrededor de 30 personas y sólo en mayo del ´78, once personas fueron detenidas por las fuerzas de seguridad. Entre las personas secuestradas se encuentra Margarita Dolz de Castorino quien fue secuestrada el 17 de mayo en su casa, en la misma fecha también fue detenido Aldo Enrique Petroni. Un día después Raúl Mazzola es introducido en un Peugeot blanco sin patentes. Mario Guillermo Camín desaparece el 22 de mayo cuando se dirigía a la UTN. Dos días después es secuestrado Daniel Romero. En la fecha patria del 25, Fuerzas de Seguridad se llevan a Víctor Herrera de su casa, el mismo día Isabel Membrive desaparece también. En tanto entre el 26 y el 28 de mayo son secuestrados Julio Oscar Sosa, Juan Carlos Romero y Juan José Galamba”.

Pese a lo expuesto, pese al extenso legajo que tiene Rico donde lo compromete y mucho por su accionar en la más sangrienta de las dictaduras militares, el juez Walter Bento sólo lo procesó por “asociación ilícita”. Al respecto NU Digital habló con Viviana Beigel, abogada querellante del MEDH (Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos). “Ahora, lo que pasa normalmente, es que los defensores apelan el procesamiento. Todavía no se vence el plazo para apelar, veremos que hacen. Una vez que la Cámara confirme el procesamiento recién ahí el Juez puede requerir la elevación a juicio, pero sería un juicio por asociación ilícita”. Sin embargo los abogados de derechos humanos agotarán todas las instancias para procesar a Rico por todos los hechos que se sospecha ha cometido. “Nosotros estamos esperando una acusación más grave porque creemos que el procesamiento que ha hecho el juez Bento no es suficiente en cuanto a la participación de Carlos Rico ya que no ha sido sólo partícipe de la asociación ilícita sino que tuvo una participación de jefe. Él estaba a cargo de un grupo de combate y nosotros eso lo hemos planteado en todas las instancias, y estamos viendo posibilidades de modificar el procesamiento en ese sentido y encuadrarlo como debe ser. Esto se está llevando adelante en la Cámara de Apelaciones, la cámara ya ha modificado varios procesamientos incluso en el caso de Romano cuando lo modificó de partícipe secundario a partícipe primario”.

La gran Romano. Cuando el barco se hunde… cuando no es por enfermedad, se van, pero en el caso de Rico la abogada no cree que haga lo mismo que su camarada de armas Otilio Romano. “La pena que le correspondería por asociación ilícita no es una pena que merezca lo que ha hecho Romano, no creo que Rico huya también del país porque realmente la pena no es tan severa como en el caso de Romano. Yo no puedo decir lo que va a hacer Rico, pero no parecería lógico que haga lo mismo que el ex camarista”.

Sin dudas, avanzar sobre el proceso de enjuiciamiento hacia todos aquellos que tuvieron que ver con la última dictadura militar es avanzar en materia de memoria, justicia y verdad. A tan sólo tres días del 24 de marzo, que en el país sucedan estos procesos judiciales es un signo de que la impunidad, al menos para los responsables de la muerte de las 30 mil personas que desaparecieron durante la dictadura, se va acabando. “Esto forma parte de la lucha contra la impunidad, nosotros vimos como Rico gozó de la impunidad durante mucho tiempo. Tienen, Romano y Rico, tres causas pendientes en donde nosotros también hemos solicitado la imputación de Carlos Rico y hay pruebas contundentes en su contra y a pesar de ello el juez Bento no lo ha imputado”, concluía Viviana Beigel.