Chacras para todos

Promover la inclusión, participación e integración social a través del arte es uno de los objetivos fundamentales del colectivo Chacras para todos.

Chacras para todos

Los sábados, de 11 a 14, funciona el elenco frente a la plaza de Chacras. Fotos Axel Lloret

Sociedad

Unidiversidad

Natalia Bulacio

Publicado el 26 DE JULIO DE 2012

El teatro es una forma de comunicación, participación y transformación social. Este propósito sintetiza y orienta el trabajo del elenco Chacras para todos (CHPT). Y de este se derivan otros objetivos como recuperar lenguajes de comunicación alternativos, facilitar la revisión y valoración de la memoria y la historia colectiva, acompañar procesos de inclusión y participación comunitaria, y participar del armado de redes de intercambio y trabajo conjunto entre vecinos.  

María Lacau es la directora artística del elenco CHPT, y coordinadora general del proyecto, en un trabajo interdisciplinario junto con la artista plástica Silvia Bove y a la psicóloga María José Gadea. La visita en el 2005 de la obra de teatro comunitario El fulgor argentino desarrollado por el grupo Catalinas Sur, le hizo pensar en la posibilidad de realizar algo semejante en Luján. Este lugar, de pintoresca geografía e inestimable mística.

Visibilizar el aire transformador que tiene el teatro les da motivos a este grupo. “Consideramos que es necesario comenzar a plantear alternativas centradas en la participación colectiva, la diversidad, los recursos y potencialidades individuales y sociales. Darnos la posibilidad de desplegar nuestra creatividad, tomar decisiones, organizarse”, afirma convencida Lacau.

La agrupación divide su trabajo en talleres que se desarrollan en la semana y ensamblan su trabajo los sábados por la mañana. Los talleres que funcionan en la actualidad son: teatro para jóvenes y adultos, títeres, teatro para niños, plástica escenográfica, tango, patín artístico, percusión, ensamble musical, máscaras y circo. Los sábados, de 11 a 14, funciona el elenco Chacras para todos con la participación de los integrantes de los talleres que quieran formar parte de la construcción de obras de teatro comunitario. 

Además, CHPT se unió al Programa Provincial de Teatro Comunitario lo que le posibilitó tener un apoyo económico, trabajar conectándose con otras agrupaciones mendocinas e intercambiar experiencias. 

Dentro de este marco, pudieron presentarse en los teatros Recreo y Pulgarcito y en la plaza Sarmiento de Palmira del departamento de San Martín, además de recibir en Chacras al grupo El chamuyo de los pasillos, del barrio La Gloria. 

En el 2010, el grupo se constituyó como una Asociación civil sin fines de lucro. Recibió un subsidio del Instituto Nacional de Teatro para equipamiento de sonido y un premio con la obra El corazón en la botella. Al año siguiente, afianzaron su pertenencia a la Red Nacional de Teatro Comunitario, estrenando su obra ¿¿Chacras sobre ruedas?? en el IX Encuentro Nacional de Teatro comunitario, realizado en Rivadavia, Buenos Aires en octubre 2011.
 
El lugar de la confluencia y resistencia 


El espacio donde funciona el proyecto -de importantes dimensiones- fue el Cine Splendid, una antigua sala de barrio que luego de su cierre pasó a ser supermercado. Más tarde, fue parte de la parroquia del lugar para posteriormente ser adquirido por el municipio. El abandono edilicio y la indiferencia comunal no se hicieron esperar.

En el 2010, luego de intensas gestiones realizadas con la Municipalidad de Luján de Cuyo, el grupo logró obtener la sala para trabajar rebautizándolo Salón para todos, aunque sigue perteneciendo a esa intendencia. 

Desde sus inicios, el grupo CHPT funcionó en los distintos espacios que podía hacerlo: la Escuela Francisco Correas, la delegación municipal, la plaza, el salón parroquial, asimismo recuperar el cine les permitió llegar a la comunidad de manera distinta, sin que se los asociara con otra institución. 

Vecinos protagonistas

Desde este lugar, ubicado frente a la Plaza de Chacras de Coria, plantean múltiples actividades culturales comunitarias, como milongas, encuentros, ensayos, etc. Pero sobre todo, desde la apertura del Salón para todos, el compromiso de los vecinos integrantes del grupo creció. 

Según sus coordinadores, la gente lo sintió como “propio”, se encargó de arreglarlo, pintarlo y de guardar cosas en el lugar. A pesar de que la Municipalidad de Luján intervino en el 2011 para impedirles actuar o guardar elementos allí, la organización y la unión de concurrentes limaron la imposición. 

Los vecinos-actores se preocupan en afinar sus cualidades a través de los encuentros mediante la constancia y la alegría. En el aire se percibe la cuasi familiaridad y el afecto entre los compañeros de grupo. 

Es importante destacar, que los vecinos son protagonistas dentro del Chacras para todos, no sólo desde lo artístico, sino también desde lo organizativo. Coordinan juntadas, asados, choripaneadas, campamentos, milongas, presentan propuestas de trabajo, se ocupan de la administración de las finanzas del grupo, etc. Es una forma de comunicación entre vecinos que revela potencialidades creativas particulares. 

La organización institucional consta de un consejo directivo, integrado por Silvia Bove, María Lacau y María José Gadea, y un equipo de coordinación por áreas, integrada por todos los profesores y directores de áreas del proyecto, integrando difusión, administración, psicología comunitaria, radio, y todas las áreas artísticas (constituidas por 20 personas). El proyecto ha sido declarado de interés provincial por la Cámara de Senadores de la provincia de Mendoza, en el año 2009. 

Al consultarles a distintas personas cuál es su vinculación con el proyecto, dijeron: 

Rafael Sanmartino, (camarógrafo): “Traigo a mi hija más grande a patín. Y por mi profesión estamos pensando en una pata de tv y cine dentro del proyecto de Chacras. Con el auge que implicó vivir en Chacras, con la llegada de mucha gente se empieza a disgregar la relación de los vecinos. Con esto, y a través de actividades comunitarias se intenta nuclear de relaciones de uno con otros”. 



Margarita Prat Gay, (asistente a patín): “Me gusta, me siento cómoda. Tengo un montón de amigas, una que es muy buena se llama Jacky. Me encanta la gente, tienen mucha onda para las juntadas. Me gusta ayudar”.








Denise Furlán, (administradora de finanzas): “Llegué al proyecto por una amiga que me recomendó. Vivís como otras cosas, hay chicos con distintas capacidades, y me sorprendió ver como los niños se integran. Hay gente de mucha plata y gente que no. Estoy contenta de trabajar”.






Mariana de la Lastra (actriz): “Me incorporé al teatro comunitario en el 2011. Lo importante es el intercambio de aportes. No sólo desde el punto de vista personal, sino que el grupo de dirección tanto en vestuario, maquillaje, sonido, música, canto, dirección teatral es de primer nivel. Esta acá lo mejor de cada uno”.






Luis Leiva (tallerista de música): “Hacemos la música para las obras de teatro y además tenemos repertorio propio. El taller es un espacio gratuito para músicos con y sin experiencia, para gente que tenga ganas de pasar un buen momento. Si lo tuviera que definir diría que ´el Chacras´ es participación colectiva. Es muy lindo ver cómo un grupo de vecinos que viven en contextos muy distintos, se juntan a través de arte para transformar una realidad social que nos molesta a todos”. 



Relación con la UNCuyo
CPHT fue seleccionada para recibir este año dos subsidios de la Universidad Nacional de Cuyo: por un lado, el Proyecto de Extensión Mauricio López, y por el otro; el proyecto de Inclusión Social e Igualdad de Oportunidades, recientemente creado. 

Con el primero, desde la Facultad de Artes y Diseño, buscan trabajar sobre la integración de saberes universitarios y sociales, participan los integrantes universitarios del proyecto (profesores, egresados, alumnos y también desde la coordinación de espacios artísticos) y gente de la comunidad. 

El segundo, también desde la Facultad de Artes y Diseño, con un proyecto llamado Que a las patas de Chacras no las pisen las ruedas, con el objetivo de ampliar CHPT a los barrios aledaños de la zona, de menores recursos, integrando a los vecinos entre sí, posibilitando nuevos espacios de expresión y participación ciudadana a través del arte. 

Obras que dicen, vecinos que no callan 

Hasta el momento, Chacras para todos ha estrenado tres espectáculos: El corazón en la botella, en diciembre de 2009, Aromas de mil colores, en formato vendimial realizada a fines de 2010 y Chacras sobre ruedas, estrenada en octubre de 2011. 

La primera fue un espectáculo musical y colorido, con ritmo y movimiento. Allí se planteó un problema que preocupa: la “sensación de desazón y miedo a la pérdida de la identidad” que se vivencia en un pueblo en el que conviven sin entenderse los viejos pobladores y los nuevos, que con su estilo de vida moderno avasallan al resto.  

Chacras sobre ruedas es la última obra realizada por el grupo Chacras para todos que describe cómo la llegada del progreso, con sus barrios privados y centros de compras, invade los espacios públicos y de los lugareños. “El tiempo pasa, el tiempo arrasa, cuidado pibe, te va a pisar. Las cosas cambian la vida rueda, que no nos quiten la identidad”, cantan los vecinos en la obra.  

Las estrategias convencionales y masivas de producción y transmisión de cultura sobrevuelan o desconocen la trama y la historia de los pequeños espacios comunitarios. Desalientan muchas veces actitudes activas de comunicación y participación y desvalorizan recursos que históricamente han estado a la mano de la gente para reproducir pequeños y grandes trozos de su cultura. 

El Chacras para todos recupera eso. Las instancias han sido construidas a partir de acontecimientos cotidianos, costumbres, festejos y luchas, que dan sentido a las historias individuales, aquellas que al compartirse provocan identificación, unen más que dividen, acercan lo nuevo, respetan lo añejo. En torno a una raíz y un proyecto en común. Este, es el Chacras para todos.