"No sólo transportamos energía, también transportamos igualdad"

Así dijo la Presidenta Cristina Fernández en la inauguración del tendido eléctrico Comahue –Cuyo y de la puesta a prueba del Metrotranvía. La mandataria ofreció un discurso  en el que además de recorrer los principales pasos dados durante su gestión, exhortó a “los que sólo hablan y critican” a terminar con las “divisiones inútiles y artificiales”.

"No sólo transportamos energía, también transportamos igualdad"

Foto: Axel Lloret

Sociedad

Unidiversidad

Penélope Moro

Publicado el 26 DE SEPTIEMBRE DE 2011

En la inauguración del denominado Tramo Sur de la línea de Interconexión Eléctrica Comahue-Cuyo, Cristina Fernández manifestó que "no sólo se está transportando potencia, sino que también se transporta igualdad”. Se trata de una obra que permitirá distribuir más energía hacia Mendoza, San Luis, Córdoba y el centro del país. El lanzamiento de esta mega obra se hizo a través de una teleconferencia con San Rafael en la que la jefa de Estado intercambió palabras con el intendente Emir Félix.

El acto se inició cuando la Presidenta verificó los avances de las obras de puesta en marcha del sistema de transporte público "Metrotranvía", que transitará por los departamentos de Las Heras, Godoy Cruz, Guaymallén, Maipú, Luján de Cuyo y Metrotranvía.

Como en una postal del pasado pero en el presente, Cristina Fernández llegó a la estación de Luzuriagan desde Godoy Cruz , a bordo de una dupla del Metrotranvía. Acompañada por el candidato a gobernador justicialista, Francisco "Paco" Pérez, saludó a las miles de personas que apostadas a la orilla de las vías esperaban desde temprano su llegada para expresarle apoyo y agradecimiento.

Además del gobernador Celso Jaque, y de Pérez y su compañero de fórmula, Carlos Ciruca siguieron de cerca a la mandataria el intendente de Maipú, Anfitrión de la visita; el postulante a la intendencia de Godoy Cruz por el Frente para la Victoria y actual titular de OSEP, Marcelo COsta; y el jefe de la comuna capitalina, el radical Victor Fayad.

Miembros del gabinete provincial y funcionarios nacionales también presenciaron el acto. Entre estos últimos se resaltó la presencia del titular de la Anses, Diego Bossio.

Por su parte, la Presidenta se mostró afectuosa con los militantes a quienes saludó de cerca en varias ocasiones y cometiendo faltas protocolares como esquivar vallados para abrazar a las mujeres que la aclamaban junto a sus hijos.

Se estima que más de 10 mil personas asistieron al encuentro con Cristina. Jóvenes, mujeres y personas de la tercera edad fueron los más efusivos en sus manifestaciones de agradecimiento hacia la figura presidencial.




El discurso de Cristina Fernández tuvo un tono dialoguista, pues convocó a los argentinos a "terminar con las diferencias artificiales y ponerse a trabajar en la construcción de este país". No obstante, la potencia discursiva de la mandataria no faltó en ningún momento de su alocución. Resaltó que a diferencia de años anteriores donde la economía era dirigida "desde afuera, hoy son las instituciones argentinas las que las deciden".

"Este es un proyecto que reivindica la decisión institucional de que las políticas económicas se deciden en la Casa Rosada y en el Parlamento de la Nación; la economía se decide aquí con las instituciones", declaró la jefa de Estado.

Cristina celebró la decisión de su gobierno y de la gestión llevada a cabo por su el ex presidente, Nétor Kirchner,  de "no haber hecho caso" a las recomendaciones del FMI -al que no mencionó- en plena crisis de 2009.

"Aprendimos que con errores o con aciertos somos los argentinos los que decidimos nuestro presente y, por sobre todo, nuestro futuro y el de nuestros hijos", insistió.

"Hay dos elementos fundamentales: historia y memoria, para no equivocarse y tropezar dos veces con la misma piedra", declaró y reivindicó como una "metáfora visionaria de lo que está pasando hoy en el mundo" lo advertido por Néstor Kirchner en 2007, cuando pidió a los organismos internacionales no hacer "pagar las deudas a los muertos".

Dijo que en el lugar "tan difícil" que ocupa como Presidenta y "con todo lo que está pasando en el mundo" su principal interés pasa por conseguir "que impacte lo menos posible en nuestros conciudadanos".

"La única distinción que podemos hacer es entre los que sólo hablan y critican, y los que nos pasamos el día laburando las 24 horas para que vivan bien los 40 millones de argentinos", expresó

"Aún hoy, en medio del fracaso más estrepitoso del que se tenga memoria, los responsables directos de ese fracaso, acá en 2001 y hoy en Europa, pretenden seguir dándole al mundo la misma medicina que nos dieron a nosotros", señaló Cristina, en referencia a las directivas de los organismos internacionales.

 Dijo además no entender "tanta necedad" y ese "contrasentido" de quienes sostienen que mediante "planes de ajustes de la economía va a llegar el crecimiento".

 "Dejemos que hablen o que critiquen, nosotros sigamos trabajando, construyendo; ese es el camino, la gente luego decide democráticamente como siempre, y cuando pasan los períodos, podremos los argentinos sentarnos tranquila y serenamente a debatir proyectos, pero sobre las bases de las realizaciones de lo que cada uno ha hecho", reflexionó.

En esa línea, pidió "que cada uno tome conciencia de lo que es capaz de brindar para su país", en tanto se comprometió a "tender la mano a quien lo necesite, sin rencores".

En varios pasajes, Cristina habló de "él", en referencia a Néstor Kirchner, y -ante el clamor de los jóvenes mendocinos que asistieron al acto- afirmó que el ex presidente "vive en los pibes, en los jubilados que cobran una mejor jubilación, en los docentes, en los científicos que volvieron al país", entre otros ejemplos.

"El amaba las obras de infraestructura porque sostenía que eso era el progreso; lo comprendió desde que fue intendente", graficó Cristina.

Respecto a las obras inauguradas sostuvo que "esto no es sólo conectar a Mendoza, es un ida y vuelta como Santiago del Estero, San Luis y Córdoba".

Antes de finalizar su discurso, Cristina manifestó que su "gran esfuerzo" está dirigido "con una gran convicción a dedicarle a los jóvenes un país mejor", libre de la "miseria, del fracaso, de las frustraciones de la pobreza".

"En definitiva, la dignidad es el objetivo final", concluyó la jefa de Estado, cuyo discurso resaltó el valor de la obra de transporte de energía y otras obras viales nuestra zona cuyana.



Cristina en Mendoza