Enclenque Teatro de Títeres vuelve con La biblioteca de Alejandrita, una historia de amor narrada con títeres, teatro de sombras y música en vivo. Esta obra narra la aventura de Galileo, un tímido niño de diez años, y de Alejandrita, una pequeña y frenética lectora que sufre un misterioso encantamiento. A partir del encuentro de estos dos niños, surge una historia de monstruos, piratas, marcianos y vampiros y, por supuesto, los infaltables personajes que surgen de los libros que Galileo le regala a Alejandrita en sus torpes intentos de declararle su amor. Mientras tanto, el barrio busca desesperadamente a un héroe y cree encontrarlo en un tal "Matamoustros".

Esta obra está escrita y dirigida por Mau Funes. Alejandrita está interpretada por Tania Casciani, a quien Unidiversidad pudo entrevistar. Tania nos contó acerca de “poner el cuerpo” en la actuación.

“Poner el cuerpo en la escena es la esencia de la actuación, poner el cuerpo como lo hacen les niñes cuando juegan, ponerlo en pos del disfrute y de la alegría del encuentro con otres, en el escenario y con la platea... Con los títeres pasa que nuestro cuerpo se extiende hacia ese objeto-títere con el que estamos jugando y se implica todo en la expresión de 'lo que se ve'; en este caso, solo las manos, o la cara y las manos", explicó.

Agregó: "Es muy divertido ver lo que pasa detrás del retablo, entre les titiriteres, es como una danza donde juegan todas las partes de los cuerpos que quedan ocultas por los telones y la oscuridad. También se pone muy en juego el uso de la voz y de los recursos vocales, porque los títeres te dan la posibilidad de interpretar varios papeles en una misma obra y mucha de su identidad depende de la construcción sonora de ese personaje. En esta obra, lo sonoro es muy importante, porque los personajes se construyen no solamente con su voz particular, sino que también 'suena' cada uno particularmente gracias a la música compuesta por Facundo Silione para cada uno de ellos y que se oye en vivo durante las funciones”.

Enclenque Teatro de Títeres ha estrenado dos espectáculos en formato de sala y otros dos en formato lambe-lambe. Con ellos ha participado en numerosos festivales de México, Brasil, Chile y Argentina. Por La biblioteca de Alejandrita recibió el Premio Escenario 2016 a Mejor Obra de Teatro Infantil; tres nominaciones en los Premios Nacionales de Títeres Javier Villafañe 2016: Mejor Actriz/Titiritera (Tania Casciani) y Mejor Diseño y Realización de Títeres y/u Objetos (Rosana López, Andrés Guerci, Florencia Breccia y Valeria Gómez). El grupo fue distinguido también en la Fiesta Provincial del Teatro Selección 2016 “por su creatividad poética y aporte al teatro infantil”; Facundo Silione por la música, composición y ejecución en vivo, y Tania Casciani por su labor como actriz protagónica.

Tania contó sobre el camino recorrido por esta obra: “Todo el proceso de la La biblioteca de Alejandrita ha sido muy satisfactorio, desde lo creativo y desde lo humano. Los reconocimientos vienen a ser un mimo más, algo que es bonito sentir, que también forma parte de un proceso de búsqueda y de honestidad con el trabajo. Creo que el mejor reconocimiento al que podemos aspirar es que la obra se siga haciendo y que la sigamos disfrutando como venimos haciéndolo hasta ahora. Cada vez que tenemos función de Alejandrita, que hay que pensar una nueva gráfica o encontrarnos en un ensayo, recibimos el premio de hacer lo que nos gusta con la gente que queremos, apostando a una niñez potente de futuro, que es con quienes nos encontramos en el vínculo platea-escenario".

Con esta historia fantástica escrita, Enclenque nos invita a jugar con la literatura. "La obra no pretende ser una moraleja sobre los correctos hábitos de lectura sino simplemente eso: un juego". Funes, su director, se concentró en desplegar el abanico de situaciones disparatadas que posibilitan los títeres de guante y el recurso del teatro de sombras. También trabajó desde un punto de vista estético. En este sentido, tanto los títeres como la música original, interpretada en vivo por el fantástico Facundo Silione, buscan y logran darle un cierre poético a la escena.

Desde su estreno, en diciembre de 2015, y hasta ahora, participó de la Fiesta Provincial del Teatro 2016, el Fedra 2016 (Tercer Encuentro de Autores Teatrales Mendocinos), el Festival Internacional Javier Villafañe 2016 y en ciclos de teatro organizados por la Secretaría de Cultura de la provincia y diferentes municipios.

Esta obra cuenta solo con el apoyo del Instituto Nacional del Teatro. La actriz hizo un análisis de la realidad en el mundo de arte hoy: “Son tiempos difíciles en nuestro país, no solo para la cultura, que está siendo vapuleada y considerada como gasto y no como inversión, y mucho menos como derecho. En este contexto, la presencia del INT es fundamental para poder llevar adelante nuestras producciones. Siempre hay cosas por mejorar, sobre todo en lo que respecta a los tiempos de los pagos, pero en este momento es lo que nos está permitiendo no solamente estrenar obras, sino también sostenerlas en cartel y generar trabajo en áreas vinculadas con lo cultural, como puede ser la comunicación, el diseño, lo audiovisual, etc.", explicó.

"Estamos –siguió– en un momento en el que es preciso resistir, en el que se ha visto frenado un proceso de profesionalización ligado a lo artístico, y esto se refleja en la baja en la cantidad de espectáculos que se estrenan año a año en nuestra provincia, la escasez de espacios culturales junto a políticas de ajuste que no favorecen ni al desarrollo de la actividad artística ni a la promoción del consumo o a la generación de públicos y audiencias. Que en este marco sigamos haciendo funciones de La biblioteca de Alejandrita no solamente es un lujo, sino que también nos provoca una profunda emoción, porque a la hostilidad de los tiempos que corren la resistimos con la ternura del encuentro”.

La biblioteca de Alejandrita es una historia de amor, llena de juegos, imaginación y aventuras. Podés disfrutarla en su única función, este sábado 25 de agosto a las 17 en la Mediateca Manuel Belgrano (Tomba 54, Godoy Cruz) con entrada a la gorra.