Este lunes comenzó a funcionar la Unidad Fiscal Especializada en Violencia de Género. En su primer día recibió 15 denuncias de todo el Gran Mendoza y dispuso cinco detenciones de presuntos agresores, según informó diario El Sol.

Mónica Romero, la fiscal de turno, escuchó a las denunciantes y tomó su declaración. Enseguida derivó a las mujeres a la asistencia de los psicólogos y psiquiatras que evaluaron el riesgo social en el que se encontraban. Luego, y después de analizar cada caso, Romero dispuso la detención de cinco personas, ya que algunas de las víctimas presentaban algún tipo de lesiones, mientras que el denunciado tenía antecedentes.

En la Fiscalía de Género se desempeñan cuatro fiscales y cinco profesionales de la salud (cuatro psicólogos y un psiquiatra). Se puso en marcha el 3 de febrero y fue la principal promesa del Procurador de la Corte, Alejandro Gullé, tras la enorme cantidad de femicidios ocurridos en Mendoza.

En 2016 más de una docena de mujeres perdieron la vida en manos de su pareja o de algún hombre vinculado sentimentalmente a ellas, según información oficial. El caso de Ayelén Arroyo, la joven que fue asesinada por su padre cuando lo denunció por abuso, puso en evidencia los déficits en el manejo de la problemática de género en la Justicia mendocina.

Pero la Fiscalía no comienza de cero. Ya alberga cientos de expedientes sobre violencia de género que los expertos que allí trabajan tendrán que analizar.

Esta unidad prestará servicio 24 horas al día y todos los días del año. Funciona entre calle Belgrano y Virgen del Carmen de Cuyo, planta baja, de Ciudad.