La "grieta" de lealtades que divide a Cataluña

En nombre de la patria, dos lógicas nacionalistas confrontan por estos días a la península ibérica. Incluso, dentro de la misma región catalana, hay ciudadanos que no comparten la secesión.

La "grieta" de lealtades que divide a Cataluña

Las calles reflejan la "grieta" de lealtades en la península ibérica. Foto: Jack Taylor / Getty Images.

Internacionales

Cataluña

Unidiversidad

Unidiversidad / Fuente: The New York Times y AFP

Publicado el 27 DE OCTUBRE DE 2017

En la península ibérica se está hablando de una “grieta” en la sociedad como pocas veces se sintió, según los medios extranjeros. El equivalente de este duelo ideológico y moral –quizás, tan familiar para los argentinos– se tradujo en una irritación generalizada en los últimos meses, en medio del conflicto político por la independencia (o no) de Cataluña.

Parejas que discuten, compañeros de trabajo que apenas se hablan, almuerzos familiares complicados, pero con psiquiatras dichosos de pacientes para intentar aliviar las tensiones. Octubre comenzó con el referéndum de autodeterminación –prohibido por Mariano Rajoy–, marcado por las cargas policiales contra quienes protegían los centros de votación. Desde entonces sucedieron manifestaciones a favor y en contra de la secesión, que llenaron los titulares de la prensa internacional, en un conflicto nacionalista que data de varias décadas y que ahora encontró su punto máximo en lo que muchos califican de "fractura social".

El periodista argentino Martín Caparrós advirtió en The New York Times acerca de lo que podría pasar tras la decisión de Mariano Rajoy de intervenir en Cataluña. En primer lugar, la suspensión de las instituciones de la democracia catalana (su gobierno, su hacienda, su policía y su televisión) gracias a la implementación de la letra chica de la Carta Magna de ese país.

El artículo 155 de la Constitución de 1978 permite que el gobierno central intervenga si una región lo desconoce. Según Caparrós, el artículo es tan rebuscadamente vago y breve que consiente casi cualquier cosa. El novelista precisó que nunca nadie lo usó, pero ahora el Partido Popular está dispuesto a aprovecharlo con la ayuda de la oposición.

La "grieta" también fisura ideas sobre la democracia. ¿Quién decide qué, cómo y por qué medios? El argumento más ponderado de los españolistas contra los indepes consiste en que no representan a la mayoría de sus ciudadanos. Es cierto que en el referéndum sólo los votaron 2 millones de ciudadanos, es decir, el 36 % del censo catalán, pero también lo es el Partido Popular, que gobierna el país con los votos de 8 millones, el 22 % del censo español. Y también es cierto que, cuando aplique el artículo 155, sus dirigentes regirán —en nombre de la democracia— una región donde no alcanzan a representar al 6 % de sus ciudadanos.

En la nota de opinión se habla de que la “grieta” también llegó a las altas esferas de poder: el salón del trono. Los españoles, cuando hablan de Cataluña, intentan minimizarlo, pero el “factor República” es central. Los independentistas no sólo quieren armar otro país: quieren, además, que ese país no tenga reyes, lo que explica la violencia con que los enfrentan el gobierno de Madrid y la corte de Felipe VI, quien, en lugar de poner paños fríos, los calienta.

 

Catalanes que quieren seguir siendo españoles

Nuria Lago, una traductora de 64 años que se opone a la secesión, dijo a la agencia AFP que está "enfurecida con todo lo que está ocurriendo", ya que los independentistas le hacen sentir que no es catalana, pese a que ella nació allí y hasta sus padres están enterrados en esa región. Pero Nuria es una de las tantas personas que, pese a ser catalanes, no comparten el mismo sentimiento de separación de España. Una postura que tomó la luz pública y la noción de parte del mundo cuando el cantante catalán Joan Manuel Serrat salió a cuestionar el proceso separatista.

Semanas atrás, Serrat le exigió a la administración catalana que "abandone su actitud sectaria y proselitista" y que, antes de "enviar a todos los catalanes al limbo de la tierra prometida de la independencia", les explique "los costos que va a representar ir al cielo".

Sin embargo, el artista también criticó el accionar de las fuerzas de seguridad del gobierno de Mariano Rajoy tras el referéndum organizado por los catalanes, que fue duramente reprimido. Al máximo líder español le pidió que "aunque sea por una vez, tome la iniciativa política y, en lugar de mandar contra la ciudadanía a las fuerzas públicas, muestre voluntad de conversar con las fuerzas políticas catalanas".

internacionales, cataluña, españa, grieta, independencia, ,