El próximo domingo Atlético Palmira visitará a Club Social y Deportivo Montecaseros con el objetivo de mantener la permanencia en la divisional una fecha antes de la culminación del Federal B.

Lo ideal para la Escoba es que termine el torneo cuanto antes, debido a que la fuerte crisis institucional que atraviesa el equipo del Loro Ortiz está afectando a más de uno. Tanto es así que Leandro Irrera, arquero Aurinegro, no anduvo con rodeos y confirmó el duro momento del club: “No hay plata ni para el traslado de los chicos que viven lejos”.

En cuanto a lo futbolístico, esto deriva en entrenamientos discontinuos. Sin embargo, la respuesta en la cancha es otra, ya que Palmira está a punto de salvar la categoría. Con 17 unidades, el Ferroviario se encuentra a cinco de Jorge Newbery, último en la zona, con seis puntos en disputa. Si el elenco de Villa Mercedes no suma de a tres la próxima fecha (recibe al CEC), Palmira automáticamente quedará salvado.

El arquero cuenta en primera persona cómo cada uno de los integrantes del plantel le pone el pecho a las balas e intenta sacar al club de la situación incómoda. “Una vez que entramos en la cancha juega el prestigio de cada uno. A nadie le gusta perder, si hay que tirarse de cabeza a todas las pelotas los chicos se van a tirar, no van a tener ningún problema. Adentro de la cancha dejás todos los problemas de lado y te enfocás en ganar”, expresó Irrera.

El optimismo prima en las tierras palmirenses y está claro el objetivo del equipo Aurinegro. “Pensamos en ganar para no depender de nada ni de nadie. Dependemos de nosotros mismos, el fin de semana podemos dejar todo cerrado”, finalizó el guardameta. 

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