Se lo vio relajado y de buen humor. De hecho, ofreció facturas a los periodistas, aprovechó para insistir en la campaña sobre donación de órganos (cuyo trámite se puede realizar de forma voluntaria en algunas mesas de Buenos Aires durante el escrutinio) y hasta deseó a la población un buen almuerzo. Y se le antojó que serían ravioles el menú elegido por los argentinos. "Que coman unos buenos ravioles", dijo, y cerró la breve nota al salir del cuarto oscuro.

Prefirió hablar más de comida que de Cristina Fernández, claro. Es que cuando se le preguntó su postura sobre la no emisión de voto de Cristina, Macri respondió escueto: "Pregúntenle a ella". 

El presidente Mauricio Macri votó en la Escuela N.°16 Wenceslao Posse, ubicada en Juncal 3131, en el barrio porteño de Palermo. Aseguró estar "contento porque se está llevando todo con bastante normalidad y hay buen tiempo en todo el país".  También desmintió que hubiese faltante de boletas de algunos partidos, tal como se denunció desde la lista de CFK, Unidad Ciudadana, y el espacio Cumplir, que lidera Florencio Randazzo.

El mandatario confirmó que almorzará con la precandidata a diputada nacional Elisa Carrió, su mujer Juliana, sus hijos y "unos amigos más". Será en la quinta Los Abrojos que el mandatario posee en el partido bonaerense de Malvinas Argentinas. Sobre las PASO, el presidente sintetizó: "Son un paso importante".