El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, preso por corrupción, fue condenado hoy a 12 años y 11 meses de cárcel en otro caso por delitos de corrupción y lavado de dinero en el marco de la investigación del Lava Jato, informó el diario Folha de Sao Paulo. Esta es la segunda condena que recibe Lula (2003-2010) por la causa conocida como Lava Jato; el año pasado fue enviado a prisión después de que la Justicia diera por comprobado que había recibido un tríplex en Guarujá, Sao Paulo, a cambio de sobornos, indicó infobae.com.

Lula preso: cómo fue su primer día en la cárcel

El expresidente de Brasil finalmente se entregó a la policía y permanece en una celda de 15 metros cuadrados adaptada para él. El domingo vio a su equipo, el Corinthians, que salió campeón.

Tras conocerse la nueva condena, el PT afirmó que, en la memoria del pueblo, Lula "siempre será mayor que sus verdugos". "La persecución contra Lula no para", aseveró la presidenta del PT, la diputada federal Gleisi Hoffmann, en un mensaje publicado en sus redes sociales.

Además, denunció que esta segunda sentencia, que puede ser apelada, llega "exactamente cuando crece la posibilidad de Lula" de ser premio Nobel de la Paz, cuya candidatura promueve el Nobel argentino Adolfo Pérez Esquivel.

En este nuevo caso, Lula fue hallado culpable de ser favorecido por las empresas OAS y Odebrecht con obras hechas en una propiedad rural que frecuentaba, ubicada cerca del municipio de Atibaia, en el estado de San Pablo.

La jueza Gabriela Hardt, quien sustituyó a Sergio Moro, impulsor de todas las causas contra Lula, avaló la versión de la fiscalía. Ésta había acusado al ex mandatario de beneficiarse de las obras realizadas en la casa de campo.