El 22 de julio se conmemora el Día Internacional del Trabajo Doméstico, un día en el que sólo se debería saludar a las mujeres, porque son ellas las que realizan la mayoría de estas labores sin recibir remuneración cuando se trata de su propia casa, y con gran precarización cuando lo hacen para terceros.

Esta situación de desigualdad fue advertida en 1983 durante el segundo Encuentro Feminista Latinoamericano y del Caribe, en el que se propuso conmemorar el Día del Trabajo Doméstico el 22 de julio,  justamente para visibilizar esta situación de desigualdad que se replica en todo el mundo.

Esta realidad presenta dos aristas: por un lado las mujeres que se ocupan de las tareas domésticas y de cuidado de hijos, hijas y que además tienen otro trabajo fuera de casa, por lo que soportan una doble exigencia. La otra, son las mujeres que se dedican a esta labor en otras viviendas, muchas de las cuales están en situaciones precarias en cuando a la remuneración y a sus derechos laborales.

En Mendoza, las mujeres realizan el 90 % del trabajo doméstico

Sociedad Unidiversidad por Unidiversidad / Fuente: Centro de Investigación Social de Mendoza / Publicado el 08 DE JULIO 2020 La situación sanitaria no solo provocó pérdidas en los ingresos familiares, sino que además remarcó las desigualdades de género. Esto resalta el estudio "Mujeres trabajadoras, las más castigadas por la pandemia", realizado por Cisme.

En cuanto a quienes trabajan como personal doméstico, las cifras oficiales muestran que en el país 22% de las trabajadoras asalariadas se desempeña en el sector de servicios domésticos, que alcanza alrededor del 76% de informalidad. Los salarios que reciben estas trabajadoras son los más bajos de la economía y estas actividades están altamente feminizadas: el 95% de las trabajadoras son mujeres. 

El trabajo doméstico incluye las labores de limpieza, de alimentación y de cuidados tanto de niños y niñas como de adultos mayores que necesiten algún tipo de asistencia.

Tareas de cuidado: "No es amor, es trabajo no pago"

Desde que el gobierno decretara el aislamiento preventivo social y obligatorio la vida sin dudas cambió. Particularmente logró una visibilización masiva la presencia de mujeres dentro de la fuerza del trabajo ya que profesiones como enfermería, sectores de servicios o tareas de cuidado y limpieza, se convirtieron en las llamadas "esenciales" y como tales quedaron en la primera línea frente al coronavirus.

En manos de las mujeres

Esta desigualdad de género a la hora de realizar las tareas del hogar, quedó plasmada en el informe “Mujeres trabajadoras, las más castigadas por la pandemia”, realizado por el Centro de Investigación Social de Mendoza (Cisme) y publicado por Unidiversidad. En base a la Encuesta de Condiciones de Vida de la Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas (DEIE), los profesionales determinaron que 90 % de las tareas domésticas son realizadas por mujeres tanto en las zonas urbanas como rurales.

El informe también puso de manifiesto que la pandemia del Covid agravó las desigualdades en cuanto a las tareas domésticas, ya que muchas mujeres trabajan desde su hogar (teletrabajo), a lo que deben sumar tareas de limpieza y cuidado de los pequeños.