Enviar un cohete a la luna

¿Qué es la evaluación privada de proyectos?

En realidad, la Evaluación de Proyectos es una disciplina muy importante dentro de la Economía.

En la carrera tenemos dos materias de Evaluación de Proyectos. En la primera de ella, se ve todo lo que es evaluación privada de proyectos, que es la que harían los empresarios antes de definir una inversión.

Lo que se enseña en nuestra facultad es cómo evaluar proyectos de inversión desde el punto de vista de un empresario privado, de manera que nuestros egresados luego puedan ayudar, asistir, asesorar a empresarios privados a realizar proyectos de inversión o a evaluar sus propios proyectos -si ellos en algún momento se transforman en empresarios-.

Estas técnicas que nosotros enseñamos no solamente se refieren a proyectos de inversión donde hay en juego dinero, sino que también son técnicas que sirven para evaluar cualquier decisión que uno vaya a tomar. Uno puede evaluar con estas técnicas desde la decisión de ir al cine o no esta noche, hasta la decisión de enviar un cohete a la luna. O sea, desde cosas muy simples hasta cosas muy complejas...y ahí, en todo ese abanico, se aplican estas técnicas.

La otra materia es Evaluación Social de Proyectos y es lo que se hace en los ámbitos públicos o del Gobierno cuando se valoran los proyectos de inversión pública que, por ejemplo, son los caminos, las escuelas, los diques, los hospitales. Entonces eso ya sí se lo evalúa –no desde el punto de vista de un empresario privado- sino desde el punto de vista de una sociedad o de una comunidad, por ejemplo, de la provincia de Mendoza.

En esta cátedra les enseñamos a nuestros licenciados a evaluar, por ejemplo, el Dique Potrerillos desde el punto de vista de los beneficios y también de los perjuicios que va a tener para la sociedad mendocina. En este sentido, te repito, no todo se mide en pesos, sino que hay beneficios y costos que se miden en otros aspectos: ambientales por ejemplo.

Ésta es una evaluación mucho más compleja que involucra a otras disciplinas. También mucho más rica para el economista donde éste no es el único que participa sino que interactúa con ingenieros, ambientalistas e historiadores. Ésta es la otra pata de la evaluación de proyectos.

En relación al proyecto de investigación que están desarrollando este año ¿En cuál de estas líneas se están enfocando?

Este proyecto de la SeCTyP en particular se enfoca en la evaluación privada.  La línea de investigación que tuvimos en el proyecto anterior era evaluación de proyectos de recuperación de áreas urbanas desprotegidas. Éste era del área social. Tomábamos áreas urbanas que estaban deterioradas y veíamos cómo se hacía para recuperarlas.

¿Por qué recuperar herramientas informáticas para la evaluación de proyectos?

En este proyecto en particular, lo que intentamos es rastrear una serie de programas nuevos de computación -más allá de la simple planilla de cálculo que siempre ayuda mucho- que facilitan las cuentas.

Nada va a suplantar el planteo, el pensar la evaluación, que es lo que debe hacerse primero. Pero después, al hacer las cuentas para analizar cuáles son los ingresos, los costos, los impuestos, hacer los flujos de beneficios, se han ido desarrollando una serie de herramientas informáticas que nosotros queremos reunirlas y volcarlas en una publicación, de manera que los alumnos las tengan a su alcance.

Porque fundamentalmente uno de los objetivos centrales de los proyectos financiados por la SeCTyP es que los resultados se vuelquen a la docencia, sirvan para mejorar nuestras prácticas docentes y lleguen a los alumnos. Es decir, que bajen a nuestras cátedras.

Entonces lo que queremos producir con esta investigación es un cuadernillo o libro que sirva luego de bibliografía para que se les haga más accesible a nuestros alumnos usar esas herramientas informáticas, que agilizan mucho la tarea a la hora de hacer la evaluación.

¿Estas publicaciones ya las han realizado con investigaciones anteriores?

Sí, siempre se trata de dejar constancia de lo que uno ha analizado en los proyectos a través de cuadernillos, libros. Es decir, que sirva para que se pueda hacer uso de los aportes o conclusiones a las que podamos haber arribado.

¿Qué metodología están utilizando para la recolección de estas herramientas informáticas?

En realidad a las herramientas en gran medida las conocemos porque las hemos usado, sobre todo los profesores que participan en el proyecto que trabajan en las cátedras que mencioné.

Pero son herramientas que no están al alcance de los alumnos. Son programas informáticos muy caros de comprar y nosotros podemos acceder porque, en muchos casos, la facultad ha comprado alguna licencia. Entonces, la idea es un poco generalizar el uso de estas herramientas. Escribir algunas guías para su utilización y, bueno, enseñarles después en clase cómo se usan. Y ya, en las clases de proyectos, se están utilizando algunos de estos instrumentos que hemos ido relevando en el equipo.

Además, este tipo de programas cambian -o se actualizan- todo el tiempo, por eso, apenas uno lo sabe, lo conoce, hay que intentar transmitírselo a los alumnos. Hay que pensar que las licencias te las venden por un año y luego las actualizan y ya traen cosas nuevas.

¿Qué variables se tienen en cuenta a la hora de hacer esta evaluación de proyectos? ¿Hay algunas a las que les dan mayor importancia, que tengan más relevancia?

Eso es muy importante, porque nosotros siempre decimos, antes de tomar la herramienta informática, o sea antes de sentarte frente a una computadora, con un programa de computación, en donde vos vayas a meter los datos, las variables y sacar un resultado -que te va a decir si el proyecto es conveniente o no- vos tenés que saber muy bien cuáles son las variables importantes y tener muy claro que los datos que tenés son buenos.

Esto se desarrolla en la etapa que se llama formulación del proyecto, que es la etapa en que hay que sentarse y pensar el proyecto. Pensar cuáles son las variables, de dónde vas a sacar la información, cuáles son más importantes y cuáles son menos importantes, y una vez que tenés todo ese panorama se carga al programa.

El programa no piensa por vos, el programa procesa lo que vos le des. Por eso le tenés que cargar buena información, las variables correctas, para que te de un buen resultado.

Esa etapa que hace el programa es mecánica, si vos hiciste algo mal en la etapa previa de seleccionar las variables y buscar información, el resultado te va a salir mal. Es como hacer una torta, si tenés una receta fantástica –y aunque pongás los ingredientes en las cantidades exactas- si vos le ponés harina de buena calidad, chocolate de buena calidad pero un dulce de leche vencido… y… la torta te va a salir fea.

La receta y las proporciones sería la herramienta informática que vos usás. Pero si yo defino para un determinado proyecto una serie de variables que tengo que tener en cuenta -por ejemplo en un proyecto agrícola- el precio de manzana, el de la pera, el precio de algún insumo, la cantidad de mano de obra por hectárea y me olvido que tengo que usar fertilizante; saco la cuenta y el proyecto me da bárbaro pero cuando lo vaya a hacer el fertilizante lo voy a tener que comprar. Entonces es un costo que no tuve en cuenta y los números van a cambiar todos.

Por eso nosotros siempre decimos también que hay que tener en cuenta las limitaciones que tienen estas herramientas.

Son herramientas, lo mismo que la matemática es a la Economía. Ésta es una Ciencia Social, la matemática es sólo una herramienta más que usan los economistas, el problema es que muchos economistas abusan de ella. Entonces, cuando solamente utilizás la matemática y te olvidás de todo lo demás ahí ya empezás a hablar cosas que no tienen ningún sentido. Te divorciás de la realidad. No se puede pensar que sentado en una computadora se puede decir todo lo que pasa en la realidad económica.