Respecto de la asamblea que se llevó adelante ayer lunes 17 en el Cine Universidad, Francisco Gabrielli, profesor de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNCUYO y realizador audiovisual, manifestó a Radio Universidad: "No sólo hubo una presencia contundente, sino que logró juntar en su demanda a sectores afines como la música, el teatro o la danza, que están indisolublemente ligados a este problema de políticas culturales". 

Gabrielli explicó que "la Argentina tiene una política cultural específica para el cine, plasmada en una ley y que ha sido política de Estado desde 1957 hasta la fecha". Destacó que en todos los gobiernos respetaron dicha legislación, con la excepción de Domingo Cavallo, quien quiso apropiarse del Fondo de Fomento Cinematográfico, pero se vio impedido por la alta resistencia del sector. Ante la similitud entre las acciones y medidas llevadas adelante por Cavallo y las aplicadas por el Gobierno nacional, el amplio abanico de profesionales que integran el sector se manifiesta en alerta. De esta manera, Gabrielli recordó que el financiamiento del Incaa lo  "provee el mismo cine" y no se trata de un impuesto o dinero que integre el presupuesto nacional y, por ello, quite fondos a otros ámbitos vitales, como la educación. 

En cuanto al posicionamiento del Gobierno nacional, que ha expresado que no modificará el financiamiento del sector, sino trabajará sobre las "irregularidades" del Instituto a partir de las recientes denuncias mediáticas, Gabrielli sostuvo que es "difícil manifestar la bajeza de los periodistas" que han abordado el tema. Además, ante el incumplimiento de otras promesas del Ejecutivo en cuanto a políticas públicas y el desconocimiento del texto de la nueva Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual (que regula el porcentaje de recaudación de publicidad en medios destinada al cine), Gabrielli consideró que se han dado "bastantes razones para sospechar". 

Y concluyó: "Los pueblos que no se ven en la pantalla no se conocen".