Héctor Timerman (1953-2018), una vida marcada por el periodismo y la política

Fue el último canciller del gobierno kirchnerista. Luchó por la liberación de su padre, Jacobo, secuestrado por la última dictadura. Falleció procesado en la causa por supuesto encubrimiento en el atentado a la AMIA.

Héctor Timerman (1953-2018), una vida marcada por el periodismo y la política

Foto: Télam

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Agencia Télam

Publicado el 31 DE DICIEMBRE DE 2018

Héctor Marcos Timerman, el último canciller del gobierno kirchnerista, tuvo una vida marcada por el periodismo, la diplomacia, la política, la polémica y el exilio, desde donde luchó por la liberación de su padre, Jacobo, fundador del diario La Opinión, secuestrado y torturado por la última dictadura militar.

Nacido en Buenos Aires, el 16 de diciembre de 1953, en el seno de una familia judía, Timerman murió este domingo procesado en una causa que investiga el supuesto encubrimiento de iraníes implicados en el atentado a la AMIA, que tiene en la misma condición a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner.

El ex funcionario se inició como periodista a la sombra de su padre y con apenas 22 años se convirtió en el más joven director de un diario: La Tarde.

Ese rol le valió un lugar controvertido en sectores de la opinión pública, que consideraron "procesista" a esa publicación vespertina fundada por su padre, razón por la que en 2010 el entonces canciller hizo un "mea culpa" por una foto en la que aparecía (junto a otros directores de diarios) con el dictador Jorge Videla luego del golpe del 24 de marzo de 1976.

En 1977, ese gobierno secuestró, torturó y obligó a exiliarse a Jacobo Timerman, quien se refugió en Estados Unidos entre 1979 y 1984.

En 1978, Héctor Timerman también tuvo que abandonar el país por la dictadura y desde Nueva York realizó acciones para lograr la liberación de su padre con el apoyo de organizaciones internacionales de Derechos Humanos.

En esa ciudad el ex canciller obtuvo su maestría en Asuntos Internacionales de la Universidad de Columbia (Nueva York) y se desempeñó como profesor de Derechos Humanos, área a la que dedicó gran parte de su trayectoria profesional.

Fue cofundador y miembro de la Junta de Human Rights Watch en Nueva York (1981-1989); director del Fondo para la Libertad de Expresión en Londres (1983-1989); miembro de la Junta Directiva de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) en Buenos Aires (2002-2004). Tras su regreso a Argentina, co-dirigió la revista "Debate" y "Tres Puntos" y había desarrollado una extensa carrera como periodista para diferentes medios gráficos.

Casado con Anabel Sielecki y padre de Amanda y Jordana, Timerman fue un colaborador frecuente de la revista Noticias y del diario Ámbito Financiero, además de ser conductor del programa de entrevistas Diálogos con Opinión. 

En Estados Unidos colaboró para The New York Times, Newsweek, The Nation y Los Angeles Times.

Además, fue el primer testigo en declarar en el juicio a Christian von Wernich, un ex capellán de la Policía de la provincia de Buenos Aires, acusado y condenado por complicidad en asesinatos y torturas, incluyendo la del padre del ex canciller.

En paralelo con su carrera periodística, se vinculó con un sector del peronismo, enfrentando al entonces presidente Carlos Menem, y tejió vínculos con el incipiente ARI, fundado por Elisa Carrió, con quien trabó una gran amistad. De hecho en 2001 fue candidato a diputado nacional por esa fuerza política.

Con la llega de Néstor Kirchner a la presidencia en 2003, Timerman se alejó de Carrió y se alistó en las filas del kirchnerismo.

En julio de 2004, Kirchner lo designó cónsul general en Nueva York, tres años después fue promovido al cargo de embajador en los Estados Unidos y, en 2010, tras la renuncia de Jorge Taiana, Timerman asumió como canciller de la gestión de Cristina Kirchner, hasta el final de su mandato. 

En 2013, bajo su gestión, el gobierno kirchnerista firmó el Memorándum de entendimiento Argentina-Irán, del que deriva la causa judicial que lo involucraba.

La última etapa de su vida estuvo signada por el deterioro de su salud, el procesamiento con prisión preventiva que dictó en su contra el juez federal Claudio Bonadio y el intento de regresar a Nueva York (que finalmente concretó, luego de obtener su excarcelación "extraordinaria" por "por razones humanitarias") para tratar el cáncer de hígado que lo afectaba desde 2015.

El 23 de enero pasado Timerman se había sometido a una operación pulmonar en una clínica porteña, y en marzo, luego de obtener finalmente su visa con la mediación de la Cancillería argentina, concretó su viaje a Estados Unidos para someterse un tratamiento experimental contra su enfermedad.

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