La normativa se propone ampliar y optimizar el derecho de la ciudadanía a la información. Surge a partir de la manipulación mediática y al tratamiento periodístico desplegado por determinados medios hegemónicos respecto a los últimos sucesos desencadenados a raíz de la intentona desestabilizadora que protagonizaron las fuerzas de seguridad en distintas provincias.

En comunicación telefónica con el programa Dicho de otro modo, que emite diariamente Radio Nacional Mendoza, el titular de la AFSCA, Martín Sabatella, brindó detalles sobre la resolución que fue votada de manera unánime por los integrantes del directorio en su última reunión.

La misma imagen de una persona retirando un colchón de un local comercial fue replicada por distintas pantallas provinciales, en el contexto de los saqueos sufridos como consecuencia de los acuartelamientos policiales. La evidente intencionalidad de fogonear el descontrol social a través de la difusión de fotografías o segmentos audiovisuales ajenos a la realidad afectan, según el funcionario, el derecho a la información veraz y responsable de la ciudadanía y limitan su capacidad de organización en momentos en que realmente fueran necesarios, además de configurar a través del miedo y la alarma un escenario de peligrosidad social.

En este sentido, Sabbatella explicó que “la imprecisión sobre dónde ocurre determinado hecho y si ya pasó o si está pasando en el momento en que es trasmitido resulta especialmente grave en el tratamiento de hechos de violencia, manifestaciones, tragedias o problemas en el espacio público, porque afecta el derecho a la información e impacta directamente en la vida de los usuarios y usuarias de esos medios”.

Para dar fin a estas prácticas periodísticas cargadas de irresponsabilidad social, es que la  resolución 1478/2013 de la AFSCA en su artículo primero establece que los servicios de comunicación audiovisual y las señales nacionales deberán incluir de modo claro y legible un mensaje consignando la fecha y el lugar de los hechos. Para las noticias completadas con imágenes registradas con anterioridad al día de su emisión se establece la sobreimpresión de “archivo”. En tanto que aquellas que sean trasmitidas desde el lugar y en el momento de los hechos, deberán consignar de modo claro y legible el lugar donde acaecen los mismos y la leyenda “vivo” o “en vivo”.

Finalmente, en el tercer artículo, el organismo dispone que sobre las informaciones e imágenes tomadas  el mismo día de su emisión pero que no fueran emitidas en vivo se deberá consignar la frase “hoy”, incluyendo la hora y el lugar en que acontecieron.

Asimismo recordó que la LSCA no regula contenidos, en tanto su espíritu es el de garantizar la libertad de expresión, por lo que la nueva normativa no recaerá sobre las imágenes que desee difundir cada medio, sino que se intervendrá sobre los "modos" en que las visibilizan.

Adecuaciones

Sabbatella fue consultado durante la entrevista sobre el estado de los planes de adecuación presentados por los diferentes grupos mediáticos tras el fallo de la Corte Suprema de Justicia que declaró la plena constitucionalidad la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual (LSCA) en octubre pasado.

El funcionario aseguró que para los primeros meses del próximo año estarán tratados todos los expedientes que han sido remitidos al organismo y aquellos en los que debió actuar de oficio. En concreto, de los 40 planes que se presentaron, 14 ya fueron aprobados, 15 se desestimaron y 11 permanecen en espera de evaluación, donde se incluyen  los de los cinco principales grupos monopólicos del país: Grupo Clarín, Telefé, Prisa, Telecentro y Grupo Uno.

Además señaló que otros temas que quedan por tratar están relacionados con el cumplimiento integral de la norma, tales como el respeto de la grilla y la manera en que están interpretadas las extensiones para cumplir con su objetivo: “La idea es que todas las empresas se ordenen en igualdad de condiciones, que no haya ventajas comparativas o competencia desleal".

Finalmente, en un sentido más amplio sobre la LSCA, Sabbatella consideró que “lo importante es que no hay duda que sobre su constitucionalidad. Entonces todos deben respetarla al pie de la letra, se acabó la idea de que alguien tenga coronita y no tenga que cumplir la ley”.