Plazo fijo tradicional vs. plazo fijo UVA: cuál es la mejor opción para protegerse contra la inflación

La tasa de referencia se mantuvo sin cambios en las últimas semanas, pero los precios aceleraron y cambiaron las reglas de juego.

Plazo fijo tradicional vs. plazo fijo UVA: cuál es la mejor opción para protegerse contra la inflación

Nacional

Unidiversidad

Publicado el 17 DE FEBRERO DE 2023

Los aumentos de precios son tan vertiginosos, que resulta muy difícil saber con anticipación qué inversión puede llegar a ganarle a la inflación en los próximos meses. Sin embargo, hay una serie de variables que se pueden analizar para conocer, al menos, cuál es la mejor alternativa en el contexto actual.

Opciones hay muchas y las recomendaciones de los expertos varían según el perfil del inversor. Para quienes buscan un mecanismo de ahorro seguro o una inversión que de al menos un margen mínimo de ganancia, siempre es aconsejable que accedan a un plazo fijo. La incógnita es a cuál.

En este sentido, es fundamental reconocer cómo funcionan las dos grandes alternativas a las que se puede acceder en el sistema financiero argentino: los plazos fijos tradicionales y los plazos fijos en UVA.

Los primeros, los tradicionales, pagan un interés fijo a los inversores, que se calcula en función a la cantidad de días que elijan mantener el depósito. La alícuota se establece generalmente en función de la tasa de referencia que publica periódicamente el Banco Central (BCRA). En este caso, la tasa alcanza un valor de 75%, un valor que fue reconfirmado ayer mismo por la máxima autoridad monetaria, pese a la aceleración de los precios.

En tanto, el plazo fijo UVA otorga un rendimiento que se determina en función de dos variables: la evolución del precio de las Unidades de Valor Adquisitivo (UVA) y una tasa fija mínima. Algunos bancos están trabajando hoy con una tasa de entre 0,25% y 1% (más UVA), pero otros mantienen la tasa en 0% y se limitan solo a dar el rendimiento que se obtiene con las UVAs.

Es importante aclarar que la evolución de las Unidades de Valor Adquisitivo se determina en función del índice CER (Coeficiente de Estabilización de Referencia), que básicamente sigue el valor de la inflación. Por eso, quienes optan por esa forma de inversión, se garantizan no perder contra el avance del Índice de Precios al Consumidor (IPC), aunque eso no garantiza que sea siempre la mejor opción.

Qué rinde más

Teniendo claro el funcionamiento de cada sistema de plazo fijo, se puede pasar a calcular cuál es la opción más conveniente en el contexto actual.

Para ilustrar la comparación, se tomará como ejemplo una hipotética inversión de $100 mil pesos por un período de tres meses, comenzando el 1° de marzo; el tradicional con renovaciones cada 30 días y el UVA por un plazo de 90 días corridos (no se permite un período menor).

 

Comenzando por el plazo fijo tradicional, se puede calcular que, con la Tasa Nominal Anual del 75%, se obtendría un rendimiento del 19,9% a lo largo de los tres meses, lo que daría como resultado una ganancia de $19.946.

Para llegar a ese valor, se debe calcular primero el rendimiento de la tasa a lo largo de todo el año (serían $75.000 si se hiciera la inversión a 365 días) y luego dividir ese monto por 12. Así, se obtendría que, luego de los primeros 30 días, el inversor obtendría una ganancia de $6.250, que sumados a los $100 mil iniciales, formarían una nueva base de cálculo de $106.250. De esta forma, a lo largo de los tres meses se alcanzaría el valor mencionado anteriormente, de $19.946.

En lo que respecta al plazo fijo en UVAs, se puede calcular el rendimiento en función de la inflación estimada por el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central.

De acuerdo al estudio, la inflación rondaría el 6% en marzo, el 5,8% en abril y el 5,7% en mayo. Si esos valores se confirman, la inversión de $100 mil avanzaría a $106.000 en marzo, a $112.148 en abril y a $118.540 en mayo. Por supuesto podría haber variaciones, dependiendo de si se cumple o no el pronóstico.

A los $118.540 de mayo, habría que sumarle otros $1.000 por la tasa fija del 1% que algunos bancos ofrecen como ganancia. En total, se llegaría a un monto de $119.540. (19,5% de ganancia nominal) a lo largo de los tres meses, unos $405,85 menos que el plazo fijo tradicional.

Claro está, que si de pronto los precios se dispararan y el Banco Central mantuviera la tasa de referencia, la conveniencia podría revertirse. Por ahora, con el escenario que se presenta más claro, resulta más atractivo el plazo fijo tradicional.

 

Fuente; infobae