Tras el 10 de diciembre, cómo gobernará Macri

En un "seminario de coaliciones", académicos analizan el el porvenir en esta entrevista de El Estadista realizada por Facundo Matos Peychaux.

Tras el 10 de diciembre, cómo gobernará Macri

Foto del perfil de Facebook de Mauricio Macri. Piensa el presidente electo. Su gestión comienza con abanico de incertidumbres políticas aún disimuladas.

Nacional

Macri Presidente

Unidiversidad

Unidiversidad

Publicado el 07 DE DICIEMBRE DE 2015

Esta entrevista fue puiblicada el domingo 6, por el sitio de análisis político El Estadista titulada “Este gobierno va a ser de coaliciones, no de coalición”. Fue aprovechando el primer seminario de coaliciones organizado por el grupo de investigación Coaliciones Multinivel, de la carrera de Ciencia Política de la UBA. Este es el dialogó con dos de los panelistas invitados y representantes de dos universidades privadas que aportan sus opiniones al nuevo gobierno nacional que asumirá esta semana. El artículo resulta importante por la mirada de estos analistas que muestran un poco el pensamiento que se instalará en la Casa Rosada. Ellos son Germán Lodola, profesor de Ciencia Política de la Universidad Torcuato Di Tella y Marcelo Leiras, el director de la carrera de Ciencia Política de la Universidad de San Andrés. Aquí, la entrevista completa:

¿Qué nos empieza a decir del próximo gobierno la conformación del gabinete? ¿Estamos ante un gobierno de coalición?

Marcelo Leiras: Solo puede ser un presidencialismo de coalición. El gabinete tiene algunos radicales en puestos ministeriales y los equipos de gobierno incorporaron gente de muchos lugares muy distintos. Que eso sea predictor de la forma en que se va a votar en la Cámara de Diputados es más dudoso pero en la Cámara Baja tiene que haber una coalición porque si no no va a poder pasar leyes. Y ha habido algunos gestos de disposición a colaborar en el Senado, en particular en la designación de autoridades, por ejemplo, lo cual sugiere que va a haber una forma de entendimiento con los gobernadores también. Este va a ser seguramente un gobierno de coaliciones, no de coalición. Va a tener que tener una coalición en la Cámara de Diputados, va a tener que tener una forma de reparto de poder y de recursos con los gobernadores y va a tener que compartir el gabinete con otras fuerzas políticas. Ahora, como PRO todavía está en formación como fuerza nacional, los que hoy parecen socios de PRO terminan siendo PRO, como el Partido por la Democracia en Chile, que era un partido independiente y después termina muy aliado a la Concertación. Pero sí, no va a poder no repartir.

Germán Lodola: Creo lo mismo. La repartija fue muy buena para la UCR. El PRO le pagó muy bien, le dio ministerios relevantes. Creo que va a haber todavía más para dar por una cuestión de limitaciones culturales del aparato político del PRO a nivel de segundas y terceras líneas, y lo que tiene de novedoso también el gabinete es que tiene otras figuras no partidarias. El gabinete además de ser un gabinete de coalición (hay incluso dirigentes de la Coalición Cívica), hay también extrapartidarios. En ese sentido, el PRO está demostrando entender un poco de qué se trata esto. El gabinete es una señal. Uno pensaba al PRO de la mano del Macri que era hasta pos PASO, un tipo que no iba a contaminarse del peronismo, que decía ‘vamos nosotros y ganamos nosotros’. Eso cambió. Lo que pasa es que pagar después de ganar es distinto a pagar antes de ganar. Pero además hay también otras coaliciones, como la coalición conservadora -como escribía Carlos Acuña en Página 12- con la entrada de liderazgos peronistas conservadores del interior entrando en la coalición, al menos a la hora de votar.

Veo más coaliciones ad hoc con los gobernadores y con peronismo del interior que con el massismo o con el FpV, obviamente. A los gobernadores nunca les conviene estar peleados con el Presidente. En ese sentido, hay que ver qué hacen provincias como Neuquén o Misiones.

Sin embargo, desde el PRO hubo señales también hacia el massismo. Jorge Sarghini como presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, Adrián Pérez designado como secretario de Asuntos Públicos del Ministerio del Interior. ¿Cómo interpretan esos gestos? ¿Son de apertura, de cooperación, de cooptación?

Lodola: De debilidad, más bien. El massismo se está jugando otro partido, que es reordenar el peronismo desde afuera. Massa tenía más incentivos en que ganara Macri no para formar parte de una coalición sino para debilitar al sciolismo. Sucede que el macrismo se encontró con un triunfo demasiado complejo: el Gobierno Nacional, la provincia de Buenos Aires y la Ciudad. Eso le trajo desafíos nuevos, la necesidad de moverse distinto.

Leiras: Le planteó más problemas políticos.

¿Cuánto creen que puede influir en la forma de gobernar de Macri la presencia de los funcionarios que no vienen de la política sino del mundo empresarial?

Lodola: Ahí va a ser interesante ver cómo se comportan los actores sociales cuando se encuentran con actores management dentro del Estado, frente a estos perfiles. Me refiero a los sindicatos, a las organizaciones sociales, los grupos económicos, los pequeños empresarios, ¿cómo van a enfrentarse a un aproach de hacer las cosas un poco diferentes, más del lado del management que del lado del Estado?

Leiras: Es una señal, no puede no influir. La forma, el estilo de gestión, el modo de vincularse, el lugar que le das a la actividad proselitista dentro de la administración. ¿Cómo no va a influir? Pero si la teoría que nosotros manejamos es correcta, los managers privados se adaptan al Estado o perecen. Si Aranguren, por ejemplo, hace lo mismo que hacía en Shell en el Estado, tenemos que quemar todos los libros. Si se vuelve buen ministro es porque va a ser buen ministro, no buen gerente. Si no, la lógica de la política debería excluirlo, como pasó con muchos ministros en México con Vicente Fox, que rápidamente tuvo que desarticular su gabinete. Eso no quiere decir que no vaya a cambiar la gestión en su modo de concebir la función pública, que va ser muy distinto en particular al prevalente en el segundo período de Cristina Fernández.

¿Las coaliciones con los gobernadores van a ser claves para garantizar la gobernabilidad?

Lodola: Yo no sería pesimista al respecto. Hay dos momentos anteriores en la Historia argentina, con Raúl Alfonsín primero y con la Alianza después, en los que los gobernadores no fueron los actores determinantes de la inestabilidad política. Para nada, todo lo contrario, los gobernadores acompañaron, les votaron mil cosas en el Senado. Pero más en este caso en el que los gobernadores están muy atados a la Nación por la deuda. ¿Cuál es el incentivo entonces de pelearse con el Presidente? Tiendo a creer que la relación va a ser más cordial, sobre todo en un contexto económico complejo.

Leiras: Aún con una situación financiera más holgada y no dependiente de los recursos nacionales sería suficiente ser socio de la implementación de políticas públicas para llevarte bien. ¿Por qué se van a pelar con el Presidente? Además, lo que uno observó este año es que la competencia provincial es provincial y la nacional es nacional, eso es algo nuevo en Argentina. Se está pareciendo más a Canadá que a México o Brasil.

Lodola: En la medida en que los gobernadores tengan garantizado que pueden pagar salarios, que la economía local está razonablemente bien y eso se los garantiza de algún modo Nación, no hay motivos para creer que el conflicto de gobernabilidad venga por ese lado. De nuevo, creo que el conflicto de gobernabilidad en todo caso podría venir más por los actores sociales que por los actores institucionales.

macri, seminario, coalición, gobierno, nacional, gobernadores,