Los jóvenes celebran la puesta en marcha del juicio y castigo

NU Digital conversó con Rubén Cuello, referente de la Comisión de Estudiantil por los Derechos Humanos y la Ética  (CEDHE) de esta universidad, sobre la perspectiva de la agrupación juvenil a cerca del proceso de memoria, verdad y justicia que se vive a nivel provincial.

Los jóvenes celebran la puesta en marcha del juicio y castigo

AXEL LLORET

Sociedad

Unidiversidad

Penélope Moro

Publicado el 18 DE NOVIEMBRE DE 2010

La culminación del juicio de San Rafael con condenas ejemplares para los genocidas imputados y la apertura de primer proceso judicial en la ciudad de Mendoza, en el que se juzga a 10 represores involucrados en la desaparición de 32 personas en el marco dictatorial, fue el motivo por el que NU Digital dialogó con un joven estudiante que integra la CEDHE.

De este modo, Rubén Cuello dijo que con sus compañeros tienen “las mejores expectativas” con el segundo juicio de lesa humanidad que se abrió el miércoles en esta provincia.

Explicó su satisfacción con la puesta en marcha del proceso de justicia que se vive en la actualidad al sostener que “la construcción de una sociedad más justa, más libre, más soberana pasa por acá y está demostrando que nuestra sociedad acompaña y que está contenta con este mensaje real de búsqueda de paz social genuina”.

El joven aseguró que esta paz que llega “está construida sobre la base del juicio y del castigo a los genocidas de la última dictadura, y no sobre un consenso vacío, el consenso de la muerte, el de los cementerios, que se ha querido instalar desde el poder y que nuestra sociedad ha rechazado”, dijo al referirse a los sectores que reclaman el olvido del pasado en complicidad con los responsables del terrorismo de Estado.

Sobre el hecho de que los represores, más allá de ser juzgados, mantienen aún en secreto los sitios donde ocultaron los cuerpos de las personas desaparecidas, Rubén Cuello dijo que “es una demostración más de la perversidad de los personeros de la dictadura”.

El estudiante, en representación de sus compañeros de la CEDHE, señaló a los militares y a sus cómplices civiles como “los responsables de llevar adelante un plan de exterminio social, que tuvo como finalidad disciplinar a nuestra sociedad para imponer un modelo político y económico excluyente”.  Y agregó: “también un modelo cultural que clausuró el diálogo y la participación democrática”

“Ellos son la expresión de lo perverso, del terror y se comportan como tales. Nosotros creemos que como contra cara a eso está la alegría y el amor a nuestro pueblo”, aseguró con convicción el joven.

Sobre la condena dictada para los represores de San Rafael, el referente de la CEDHE dijo que con ella “se ha reivindicado a nuestro pueblo, se ha logrado justicia a través de la reconstrucción de la memoria en la búsqueda de la verdad y creemos que es un momento histórico”.