Quemar la vida, despreciar al pobre
El epistemólogo y docente de la UNCUYO se aterroriza y reflexiona a la vez sobre los actos de violencia extrema que sucedieron en los últimos días en el país. Sin duda, el incendio intencional contra Jesús, el hombre en situación de calle, refleja el odio argento hacia el "pobre, el sucio y el malo", es decir, el reflejo de lo que no hicimos ni hacemos bien como sociedad.