Eduardo Galeano: "Las palabras me caminan a mí"

Durante su estadía en Mendoza el prestigioso escritor uruguayo encantó una vez más a los miles de lectores que ayer en la noche concurrieron a La Nave Cultural para escuchar de la propia voz del maestro los relatos de resistencia latinoamericana, memoria y humanidad. 

Eduardo Galeano: "Las palabras me caminan a mí"

Gentileza de Horacio Gauna

Sociedad

Unidiversidad

Penélope Moro

Publicado el 24 DE MARZO DE 2011

Las instalaciones del centro cultural se vieron desbordadas ante las presencia de casi 4 mil personas dispuestas a escuchar las palabras del autodefinido “sentipensante”, Eduardo Galeano. Sin embargo sólo la mitad puedo hacerlo desde el interior de La Nave, mientras que el resto tuvo que conformarse con presenciar la charla a través de una pantalla gigante que se montó en las inmediaciones de la sala.

Durante una hora el genial escritor maravilló a un público, en su mayoría conformado por jóvenes, que con continuos aplausos no dejó de transmitirle admiración y respeto. Por su parte el autor de Las Venas Abiertas de América Latina, entre tantas nobles obras, relató historias y anécdotas personales concernientes al proceso creativo de la escritura bajo el título “Aventuras y desventuras del oficio de escribir”.

Con la cadencia de sus palabras y un tono particular signado por la sencillez, emotividad y sensibilidad que lo caracterizan, el uruguayo narró historias contendidas en muchos de sus libros tales como El libro de los Abrazos, Bocas del Tiempo, Espejos y Las Palabras Andantes, entre otros. También dio luz a narraciones inéditas que a través de  su marcado sentido del humor y la contundencia de sus pensamientos crearon en el auditorio un clima de profunda intimidad.

Las dictaduras latinoamericanas, la complicidad eclesiástica, el compromiso social, los derechos humanos, el fútbol como metáfora de la vida y el valor de la utopía fueron sólo  algunos de los temas sobre los que se refirió Galeano.  

Al momento de definirse como escritor, el uruguayo sintetizó: "Yo soy un caminante, caminado, yo voy por caminos, caminando y, dentro mío, las palabras me caminan a mí". Y luego contó las censuras por las que atravesaron sus escritos en las épocas de genocidio dictatorial, en especial Memoria del Fuego y Las Venas Abiertas de América Latina. En este punto concluyó que la prohibición debe ser la mejor forma de promoción, ya que en su país sus libros no dejaron nunca de entrar a las cárceles.

Emocionado hasta las lágrimas cerró el encuentro con sus lectores con la historia que relata lo que considera  su “primer desafío en el arte de narrar” :

“El pueblo boliviano de Llallagua vivía de la mina, y la mina devoraba a sus hijos. Metidos en los socavones, las tripas de las montañas, los mineros perseguían las vetas de estaño y en esa cacería perdían, en pocos años, los pulmones y la vida. Yo había pasado un tiempito ahí, y me había hecho algunos amigos. Y había llegado la hora de partir.
Estuvimos toda la noche bebiendo, los mineros y yo, cantando tristezas y contando chistes, a cual más malo.
Cuando ya estábamos cerca del amanecer, cuando poco faltaba para que el chillido de la sirena los llamara al trabajo, mis amigos callaron, todos a la vez, y alguno preguntó, o pidió, o mandó:
–Y ahora, hermanito, dinos cómo es la mar.
Yo me quedé mudo.
Insistían:
–Cuéntanos. Cuéntanos cómo es la mar.
Ninguno de ellos iba a verla nunca, todos iban a morir temprano, y yo no tenía más remedio que traerles la mar, la mar que estaba lejísimos, y encontrar palabras que fueran capaces de mojarlos”.

Eduardo Galeano fue invitado a narrar sus historias en La Nave Cultural en el marco del ciclo La Universidad en el Debate Social que organiza la Secretaría de Extensión Universitaria de la UNCuyo. Las palabras del mágico y realista escritor fueron antecedidas por un show musical a cargo de las músicas locales Elbi Olalla y Victoria Di Raimundo.

Un día antes el ícono de la literatura latinoamericana recibió el máximo galardón que ofrece dicha casa de estudios a referentes comprometidos con la realidad social.