Esta fue una de las consideraciones del autor de la actual Ley de Salud Mental, Leonardo Gorbacz, con respecto a la represión realizada por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires sobre pacientes y personal del hospital Borda. Gorbacz, quien además es psicólogo, también habló acerca de la necesidad de desmanicomializar el sistema de salud.
Leonardo Gorbacz Foto. Web
El viernes 26 de abril la Policía
Metropolitana, dependiente del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires,
realizó una contumaz y repudiable represión contra trabajadores y
pacientes del Hospital Borda. Durante el procedimiento también
fueron reprimidos periodistas, políticos e integrantes de
organizaciones sociales.
El saldo fue de 40 heridos y ocho
detenidos, en un nuevo hecho de represión que se suma a la gestión
del Pro en la Capital Federal, que ya ha establecido precedentes como
lo represión de un sinnúmero de familias en el Parque Indoamericano
a finales de 2010.
Aunque gran parte de la
responsabilidad de estos hechos debe recaer sobre la figura del
ministro de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, Guillermo
Montenegro, la orden política le corresponde al jefe de Gobierno de
la Ciudad, Mauricio Macri, quien obstinada y coherentemente con su
filosofía política, decidió respaldar la medida.
En base a ello, a través de una
entrevista con el programa El Alegato (Radio Nacional
Mendoza), el psicólogo, ex diputado nacional y autor del
anteproyecto de la actual Ley de Salud Mental, Leonardo Gorbacz,
realizó una serie de consideraciones respecto a la represión
ejecutada por la administración de Macri. Asimismo, reflexionó en
torno a la situación actual del sistema de salud mental y los
desafíos abiertos por la Ley vigente, aprobada durante el 2010.
“Repudio estos hechos que se realizan
sobre las personas más vulnerables y que ya vienen sufriendo una
situación de violencia”, indicó el profesional. En este sentido,
advirtió: “El encierro y la institucionalización en salud mental
ya es una forma de violencia permanente y cotidiana”.
Como si los internos fueran plantas
Gorbacz opinó que el Gobierno de la
Ciudad de Buenos Aires, en base a sus intenciones de generar un
negocio inmobiliario ubicado en el predio donde está el Borda, ha
tratado a las personas como si fueran plantas.
“Lo que está haciendo Macri es lo
que vienen haciendo permanentemente. Esta situación me recuerda al
caso de los árboles ubicados en la calle 9 de Julio, que el Gobierno
de la Ciudad decidió trasplantar para hacer el metrobús. Parece que
las personas, para él (Macri) deben ser como árboles. A él lo
único que le importa es ocupar ese espacio y trata a esas personas
ni siquiera como árboles sino como objetos. Eso está claro, y salvo
el propio Macri y su equipo, nadie puede defender algo que es
completamente indefendible y que además todos vimos en las
imágenes”, opinó.
Represión más violencia
institucional
En relación con la realidad del
sistema de salud mental, el ex diputado explicó que hay que tener en
cuenta que las personas que han sufrido esa violencia brutal el
viernes 26 de abril, todos los días sufren otro tipo de violencia
invisible de tipo institucional. “Sería muy penoso que nos
preocupemos hoy por esta situación y que mañana sigamos mirando
para otro lado, porque esa situación no sólo se da en el Borda sino
que se da en todas los neuropsiquiátricos del país”.
Con respecto al destino de los
pacientes del Borda, luego de que el Gobierno derribara los talleres
terapéuticos en los cuales trabajaban, Gorbacz opinó que las
personas al ser internadas pierden sus vidas, sus relaciones y la
capacidad de trabajo. En este sentido, “los talleres protegidos son
herramientas que intentan que las personas empiecen a recuperar
alguna habilidad laboral y que esa capacidad les ayude a sostener
cierta autonomía, pensando en la posibilidad de una reinserción en
la comunidad. Eso, evidentemente, quedó anulado y la preocupación
es cómo sigue esto, porque ya no están solamente los talleres
protegidos sino que la impresión es que Macri va avanzar con ese
desarrollo inmobiliario por sobre el resto de los espacios que ocupa
el hospital Borda”, señaló.
Un cambio de paradigma
El especialista opinó que Mauricio
Macri tiene pensado realizar su negocio inmobiliario sin tener un
plan de cumplimiento de las leyes de salud mental, tanto de la Ciudad
como de la Nación, lo cual implicaría tener, por ejemplo, un
programa de externación.
“Porque acá lo que hay que discutir
primero es qué es lo que se hace con las personas y no qué es lo
que se hace con el terreno. Es decir, en lugar de priorizar un plan
de salud mental para que las personas que están sufriendo en la
institución puedan recuperar su autonomía y volver a vivir en la
comunidad, se prioriza, por el contrario, la idea de la utilización
de los terrenos”, dijo.
“Ante eso, no debemos responderle de
la misma manera, es decir, no podemos oponernos a que Macri utilice
esos terrenos para el centro cívico siendo que en esos terrenos
tiene que haber un manicomio, porque el manicomio tampoco sirve. Lo
que tenemos que hacer es discutir y poner en el foco de la discusión
qué es lo que necesitan las personas que están allí: estas
personas necesitan un plan serio de externación que incluya becas
laborales, cooperativas de trabajo, viviendas con acompañamiento,
hospitales de día y la Ciudad en su conjunto necesita desarrollar un
sistema de salud mental para que la gente pueda atenderse cerca de su
casa ,en centros de salud y hospitales públicos. Finalicemos con
este sistema manicomial que termina siendo el eje de todo el sistema
de salud mental en el país”, afirmó.
Parar a Macri
Según el especialista, el cumplimiento
de la Ley de Salud Mental está lejos de los planes políticos del
macrismo. “No solo que está lejos del macrismo sino que están
yendo en el sentido contrario: en lugar de devolver derechos están
violando aún más los derechos de una manera absolutamente brutal.
Esa gente ya ha sufrido demasiado como para que encima se vaya con la
policía a tirarles gases, enfrentarlos y amenazarlos con echarlos
prácticamente a la calle. Porque el plan que tiene Macri, en la
medida en que no incluye a las personas que están ahí, solamente
les deja como horizonte terminar en la calle. Eso, de ninguna manera
es lo que propone la ley de Salud Mental nacional”, afirmó.
“Por eso hay que tener mucho cuidado
y hay que frenar a Macri”, indicó el psicólogo. “No es posible
que realice en estas condiciones ningún desarrollo urbanístico en
los terrenos en los que está el Hospital. Pero tampoco hay que dejar
la situación del Hospital tal como está, sino que hay que estudiar
la situación de las personas una por una y ver cómo se las puede
recuperar. Después de diez o quince años de estar ahí
absolutamente de manera innecesaria, en una situación de reclusión
más que de internación, hay que ver cómo hacemos para reparar el
daño que le hicimos a cada uno de los internados”, reflexionó.
Obedecer la Ley
El eje central de la Ley de Salud
Mental, en términos conceptuales, es considerar a las personas con
padecimientos mentales como sujetos de derecho y no como objeto de
tutela del Estado.
“Es decir, no son personas que
tenemos que proteger en el sentido de tomar decisiones por ellos,
sino que tenemos que respetarlas como sujetos de derecho y que tienen
que poder ejercerlo. Fundamentalmente, hablamos del derecho a la
autonomía. En términos de política, el eje pasa por la
desmanicomialización, es decir, sustituir el sistema de atención en
manicomios, que son hospitales preparados para encerrar, aislar y
mantener a las personas muchos años, por otro sistema de atención
que esté integrado al sistema de salud: es decir, que en los
hospitales en donde cualquier persona se atiende, por ejemplo, por su
problema cardiológico, dermatológico o traumatológico, también
puedan atender su problema de salud mental sin discriminaciones. Y si
fuera necesaria una internación, que la misma pueda hacerse en un
hospital general y dure lo que suele durar una internación en un
sistema de salud, que no puede ser más de dos o tres semanas”,
explicó Gorbacz.