Hollande deberá responder por el sueldo de su peluquero, de casi 10 mil euros

La revelación de que su peluquero gana 9895 euros por mes generó revuelo en Francia. Este jueves 14 de julio, luego del tradicional desfile por el 227º aniversario de la Revolución Francesa, será interrogado, como cada año, por periodistas en directo por televisión.

Hollande deberá responder por el sueldo de su peluquero, de casi 10 mil euros

El peluquero cobra lo mismo que un ministro. Foto: el cronista.com

Internacionales

Unidiversidad

Unidiversidad/ Fuente: diario La Nación

Publicado el 14 DE JULIO DE 2016

El jefe de Estado galo, François Hollande, está sumergido en un torbellino desde que los franceses supieron que su peluquero personal, que no lo deja ni a sol ni a sombra, cobra un salario mensual de casi 10 mil euros: casi igual que un ministro y más de 8 veces el salario mínimo del país.

Es probable que Hollande tenga que dar una explicación a los periodistas que lo interrogarán hoy durante la tradicional entrevista televisada con motivo del 14 de julio, fiesta nacional que conmemora la toma de la Bastilla, símbolo del absolutismo monárquico. Será su último festejo de la revolución antes de las presidenciales de 2017. El episodio del peluquero podría significar un golpe mortal para sus intenciones de reelección en 2017. Justo ahora que, gracias a una incipiente reactivación económica, su popularidad comenzaba a aumentar. Según un sondeo del instituto IFOP publicado anteayer, después de haber permanecido estancado en el 13% de opiniones favorables durante casi un año, Hollande alcanzó el 21 % en junio y el 28 % este mes.

"El coiffeur del presidente se corta los pelos en cuatro desde el 16 de mayo de 2012. Y lo hace por 9895 euros de salario bruto mensual", escribió el semanario político-satírico Le Canard Enchaîné en su edición de ayer miércoles 13, según cuenta La Nación. La expresión "se corta los pelos en cuatro" usada por la centenaria publicación, célebre por no equivocarse jamás en sus primicias, significa que el fígaro en cuestión, Olivier Benhamou, vive dedicado exclusivamente al mandatario francés desde que asumió sus funciones.

La noticia, que cayó como una bomba en un país con más del 10 % de desempleo y donde el salario mínimo es de 1200 euros mensuales, fue confirmada ayer por el propio vocero presidencial. Stéphane Le Foll tuvo serias dificultades para justificar la absurda decisión de Hollande, que llegó al Palacio del Elíseo presentándose como "un presidente normal", para distinguirse de su antecesor. Entre otros excesos, el conservador Nicolas Sarkozy gastaba 8000 euros por mes en una experta en belleza, encargada de maquillarlo para las cámaras.

"Puedo comprender los interrogantes. Puedo comprender que haya juicios... Todos nos peinamos, ¿no? No se trata de cualquiera. En fin, es todo", balbuceó Le Foll, lo que provocó el sarcasmo de los periodistas acreditados ante la presidencia.

Según el periódico, el convenio de trabajo del "coiffeur personal del jefe del Estado" estipula que es empleado "por toda la duración del mandato presidencial". Se trata de un contrato por 5 años, que representa una remuneración acumulada de 593 mil. Esos ingresos están acompañados de "eventuales compensaciones de alojamiento" y otras "ventajas familiares", precisa. Los colaboradores de Hollande no verían, al parecer, nada de extravagante en ese contrato.

"Olivier B.", nombre en código atribuido por la presidencia al artista del brushing, empieza temprano su jornada laboral, con una enorme amplitud horaria: peina y vuelve a peinar al presidente todas las mañanas y siempre que es necesario, cada vez que Hollande tiene que hablar en público, incluso los fines de semana y durante los viajes al exterior.

Interrogada por Le Canard Enchaîné, la abogada del peluquero explicó que se trata de un contrato de exclusividad. Eso significa que su cliente tuvo que cerrar su salón, situado en el elegante distrito XVII de París. "Está a disposición del presidente las 24 horas del día. Jamás se hace reemplazar por nadie", agregó.

Es verdad, Benhamou tuvo que vender rápidamente su comercio. Su abogada afirma que, incluso, "tuvo que regalarlo", después de que Hollande le propuso ocuparse de cortarle el pelo, teñirlo y peinarlo todos los días. Y si bien para muchos el resultado deja bastante que desear, sobre todo cuando se trata del color, el presidente francés parece estar satisfecho.

hollande, peluquero, francia, ,