De cómo perder una elección que se tenía casi ganada

El Sociólogo Enrique Bollati analiza las elecciones del domingo y sobre todo, la campaña del candidato radical. Para el encuestador, hay básicamente dos formas de medir intención de voto. La primera es preguntar directamente a quién votarías, mientras que la segunda es simular voto, presentar simulacros de boletas y hacer que la gente juegue a votar, con sobre y todo.  

De cómo perder una elección que se tenía casi ganada

Foto: Axel Lloret

Sociedad

Unidiversidad

Enrique Bollati

Publicado el 23 DE OCTUBRE DE 2011

Hablamos de Iglesias, claro. Pero antes de entrar en tema demos una repasada a cómo queda el mapa político de la provincia.

 Al igual que Jaque, Pérez no le debe ser gobernador a nadie dentro del PJ provincial (dije “provincial”, conste), pero a diferencia de Jaque, no llega solo, sino que fue claramente apoyado por varios sectores del PJ y no tan claramente, pero apoyado al fin, por otros.

En síntesis lo que pasó es bueno, la situación en sí es auspiciosa. Pérez, al igual que Jaque, puede armar su gabinete como mejor le plazca, ya que no le debe facturas a nadie; ni al Chueco, ni a los azules, ni a los “jarilleros” sanrafaelinos, ni a los “guaymachinos”, ni a los “lasherindios”, aunque ha contado con más apoyo expreso y tangible de “guaymachinos” y “lasherindios”; pero son favores, no facturas, y en ese sentido gana con el apoyo de todos, y esto marca una diferencia sustantiva con la situación que tuvo que enfrentar Jaque, que se la bancó casi solito y mi alma.

La diferencia con Jaque, es que Pérez tiene una larga cola de candidatos para armar ministerios, mientras que el Celso, en su momento, estaba más sólo que loco malo. Y este no es un detalle menor; Pérez llega con un PJ, detrás de él, todo lo consolidado que se pudiera pedir.

¿Se imaginan si Iglesias hubiera tenido que armar gabinete con la actual situación interna de la UCR? Los radicales tendrán que restañar sus heridas, saldar su cuentas pendientes y generar ese animus societatis que hoy no tienen, y del cual hizo gala el PJ.

Véanlo ahora, ex post: a todos los dirigentes peronistas les convenía que Paco ganara, mientras que a la mayoría de los [principales] dirigentes radicales les convenía que el Mula perdiera, ¿o no?

Volvamos a lo de perder una elección prácticamente ganada. Por empezar NUNCA LA TUVO GANADA; en ningún sondeo de simulación de voto desde mayo en adelante el Mula apareció ni cerca de la punta; siempre estuvo a una distancia prudencial, y pongo a mis amigos periodistas del CICUNC como testigos, que pudieron ver, aunque no publicar, esas encuestas. ¿Cómo es esto de que nunca ganó?

 Hay básicamente dos formas de medir intención de voto. La primera es preguntar directamente a quién votarías, mientras que la segunda es simular voto, presentar simulacros de boletas y hacer que la gente juegue a votar, con sobre y todo.

En muchas elecciones no hay diferencias entre una y otra técnica, pero en este caso la diferencia era vital, ya que se configuraba una situación muy particular: en la nación no había ninguna oposición consolidada, mientras que en Mendoza pasaba todo lo contrario, había una UCR con un fuerte caudal de seguidores, y esto configuraba potenciales contrapuestos que cada hijo de vecina resuelve a su propia manera, de modo que la forma más clara (no exacta, pero clara) es “jugar a votar”.

 Y bien, salvo en la última semana, Iglesias estuvo siempre por encima de Pérez en preferencia directa (¿a quién te gustaría votar?), pero desde mayo, y aún con un Pérez muy desconocido en ese momento, el candidato del FpV le ganaba a Iglesias en cualquier escenario, excepto si el Mula hubiera ido con los socialistas.

Pero el Mula hizo todo lo necesario para perder, mientras que el PJ hizo todo lo necesario para ganar; así de simple. Repasemos.

 Primero Iglesias negó a su candidato a presidente, que es negar a su partido a nivel nacional. Ya hemos dicho que esto constituyó una profecía autocumplida: tanto jodió el Mula con que cortaran a Alfonsín, que la gente le hizo caso y lo eliminó de sus posibles elegidos. Esto le configuró la necesidad de un porcentaje de corte de boletas imposible de conseguir, algo que bien debería saber él, ya que fue gobernador en el ‘99 pese a que el favorito era Balter, justamente porque el ganso no pudo superar ese límite de 16 puntos de corte. Y eso que Balter iba SIN boleta de presidente; corte más fácil si que quiere.

En segundo lugar niega a su propio partido en la provincia: logra su candidatura con montañas de heridos que nunca estuvieron heridos de muerte; desplaza mal a un legítimo Cornejo, ignora sistemáticamente a su “padre” político, un aliado formidable como es el Viti Fayad, niega a los radicales que la reman contra viento y marea en Las Heras y acuerda con el “multibolético” Amstutz, etc.

Ok, hasta acá se configura una situación donde prácticamente no hay UCR, porque él se encargó de coartarla; en consecuencia, se necesita de nuevas alianzas, porque no se puede ganar una elección sólo, sin partido. Seamos positivos y entendamos la alianza con Amstutz como parte de esta estrategia, pero no nos engañemos: el tránsfuga (*) lasherino no le aseguraba el triunfo; necesitaba de los socialistas (boleta nacional) y o a los demócratas (estructura provincial). Pero no negoció con ninguno, porque como Mula que es, no les ofreció nada a cambio de ir juntos.

Después de las primarias, los gansos se envalentonaron y se cortaron solos, pero los socialistas siguieron esperando en vano (igual que el Viti) que el Mula les desocupara algunos cargos a legisladores en la boleta radical. Nada, ni el décimo quinto concejal en Pata Mora. Así, los socialistas siguieron su propio camino (lo que en mi opinión es bueno) y el Mula se vuelve a quedar solo.

Como resultado de eso, varios de los intendentes radicales, que sí tenían mucha intención de de voto y la vaca bastante atada en sus propios municipios, deciden hacer, ellos mismos, la alianza con el socialismo (Cornejo en Godoy Cruz, Mansur en Rivadavia). Se afirman ellos, pierde el Mula.

Incluso muchos candidatos que aspiraban a la intendencia desde la oposición (Narváez en Guaymallén, López en Alvear, Rosello en Luján, etc.) también cierran con los socialistas, con pérdida para el Mula. Sólo unos pocos (Giner y Abed, entre otros), quedan poniendo el pecho a las balas con el escudo de la UCR, y con muchísima más intención ellos que el Mula en sus propios departamentos.

Ok, queda el Mula solito y mi alma, como Jaque en 2007, sólo él y el sello de su partido. Pero ojo, no nos equivoquemos: Jaque llevaba a Cristina en la boleta, no pedía que la cortaran…

Tercera: ¿cuál era el principal atributo de Iglesias? Él, su persona, su experiencia. ¿en qué se centra la campaña publicitaria? En negar a Alfonsín (“cortá boleta…”)

¿Es Iglesias tan ingenuo para no darse cuenta que si Alfonsín no llegaba a los 20 o 22 puntos, sus propias chances eran escasas? ¿Tanto se olvidó de por qué le ganó a Balter?

En síntesis: ninguna cosa que se pudiera hacer para perder se dejó de hacer.

¿Y el Paco? ¿Y el FpV? Siempre contaron con el arrastre de Cristina, pero sería ingenuo limitar el peso del PJ provincial a eso. El PJ, y lo dijimos muchas veces, no tenía a Messi, pero tenía un excelente pack de forwards, y al igual que nuestros Pumas, con eso tienen la capacidad de cubrir toda la cancha y hacerle partido al que se ponga enfrente. Pregúntenle a los All Blacks, si no, que son tremendo equipo y no algunos Messi, como la tuvieron que parir..

5 intendentes con endemoniada intención de reelección de los 8 departamentos grandes, contra 1 (Godoy Cruz) y con boleta dividida, es algo que no se puede subestimar; hacerlo sería necio. Fue necio.

Personalmente, y por una cuestión profesional, nunca tomo partido por ninguno de los candidatos; no podría hacer bien mi trabajo si me embanderara, ¿se entiende? Pero me alegro que haya ganado Paco, creo que es lo mejor que nos podía haber pasado a los mendocinos en la actual coyuntura.

En serio; con la UCR en semejante crisis, con un PD en recuperación, pero sin los suficientes cuadros para armar aunque sea un doble al Paddle y con un socialismo que acaba de abandonar la Femefa para entrar a la primera, el FpV aseguraba, a mi juicio, la gestión más ordenada. Por eso digo que lo que pasó no es malo, para nada.

¿Y si me equivoco? No dramaticemos: mi opinión en este sentido no es tan importante, porque sea como sea, Ud. y yo hoy la tenemos que seguir remando, así que…

Vermouth con papas fritas y… ¡Good Show!!!!!!

 

(*) Según la RAE; tránsfuga es:

1. com. Persona que pasa de una ideología o colectividad a otra.

2. com. Persona que con un cargo público no abandona este al separarse del partido que lo presentó como candidato.

3. com. Militar que cambia de bando en tiempo de conflicto.