La entrada de la robótica, la inteligencia artificial y la tecnología en el mercado laboral nacional podrían ocasionar la destrucción de más del 30 % de empleos durante los próximos 15 años, según el ingeniero Daniel Laco, quien está a cargo de la Comisión de Recursos Humanos y Educación de la Cámara de Empresas de Software y Servicios Informáticos (Cessi).

No obstante, subrayó que la reducción de los trabajos rutinarios y de fuerza manual podrían ser compensados por aquellas actividades que requieran conocimiento tecnológico. “En la industria del software nacional quedan anualmente 5000 puestos de trabajo sin cubrir”, preciso Laco en diálogo con Radio Abierta.

Asimismo, remarcó que en la actualidad, para poder acceder a trabajos del área de manufacturas, se necesitan otro tipo de capacitaciones y conocimientos, es decir, por lo menos haber alcanzado el nivel terciario o haber estudiado en una escuela técnica. “En la industria manufactura de Estados Unidos se requieren 3 millones de trabajos por año y sólo están pudiendo cubrir un millón”, graficó el ingeniero.

Como consecuencia de este “tsunami tecnológico”, Laco indicó que será necesario un cambio profundo y radical en el campo educativo. Incluso, ya se está aplicando en algunas latitudes del mundo. En ese sentido, un caso paradigmático es el de Singularity University (Estados Unidos), el centro de innovación tecnológica más importante del mundo, en el que no se otorgan títulos ni créditos, señaló el experto.

Siguiendo esa misma línea de razonamiento, el ingeniero sugirió que la educación debería ser más personalizada, esto es, responder a las competencias de cada persona y con una modalidad de formación continua.

En cuanto al nivel de inversión que se requiere para el desarrollo de este sector, Laco precisó que es muy bajo en comparación con otro tipo de industrias. “Si en el país se quiere desarrollar la industria aeroespacial o la industria nuclear, el costo de entrada es altísimo. En el caso del software, en el que se requiere acceso a una computadora cuántica (última generación), hoy con una tarjeta de crédito lo tengo a mi alcance. Sólo necesito conocimiento de la gente, una computadora y conexión a internet”, sentenció.