Vacunación de personas con discapacidad en Mendoza: piden ampliar el cupo

Es uno de los grupos con mayor riesgo. Apuntan primero a grupos institucionalizados. Madres y padres autoconvocados de niños, niñas, jóvenes y adultos con discapacidad que no se encuentran en ese régimen piden la inmunización.

Vacunación de personas con discapacidad en Mendoza: piden ampliar el cupo

Foto: neuqueninforma.gob.ar

Sociedad

Vacuna COVID

Unidiversidad

Unidiversidad / Ángeles Balderrama

Publicado el 15 DE MARZO DE 2021

Con el avance de la pandemia de COVID-19  y la llegada de vacunas al país, el Gobierno nacional definió grupos prioritarios, entre los que se encuentran adultos mayores; personal de seguridad, salud, docentes; adultos con factores de riesgo y otras poblaciones estratégicas. Sin embargo, en ninguna de esas categorías se incluyó específicamente a las personas con discapacidad. A tres meses del inicio de la campaña de vacunación, aquellas personas que se encuentran institucionalizadas en Mendoza comenzaron a recibir las dosis y ya se vacunaron cerca de 2.200 personas.

“Las personas institucionalizadas, especialmente quienes están dentro de los 'oales' (Ahora llamados Equipos Técnicos Interdisciplinarios (ETI)) ya se están vacunando, y desde la semana pasada se empezó con quienes están en centros ambulatorios y de día, tanto a las personas que asisten como a los trabajadores. Pero no se ha vacunado a todos, sino a aquellos centros que hicieron las gestiones y presentaron la documentación correspondiente”, explicó Germán Ejarque, ex director de Discapacidad de Mendoza.

A pesar de no estar incluidas dentro de alguno de los siete grupos prioritarios para recibir la vacuna contra la Covid-19, las personas con discapacidad son parte del grupo de riesgo. En este sentido, un informe realizado por la Agencia Nacional de Discapacidad resalta que el porcentaje de letalidad entre la población con discapacidad con CUD (Certificado Único de Discapacidad) fue más alto comparado con el de la población total: 7 % contra el 2,2 % de la totalidad de la población. “En la única provincia argentina en donde se registró la menor tasa de mortalidad fue Mendoza, con un 3,1 %”.

“En todas las jurisdicciones es posible observar que la letalidad del Covid-19 entre las personas con discapacidad es mayor que la letalidad entre la población total de casos a nivel provincial: es posible entonces pensar, que las personas con discapacidad tienen más chances de morir por esta enfermedad, reafirmando la necesidad de considerar a esta población en situación de riesgo mayor que el resto de la población en el marco de la pandemia”, expresa la investigación.

Frente a esta realidad, a la cual se suma la complejidad de correr mayor riesgo de desarrollar patologías más graves y de morir a causa de la COVID-19, Mendoza se integró al grupo conformado por Neuquén y San Luis, únicas provincias que comenzaron a inmunizar a personas con discapacidad. Sin embargo, madres y padres autoconvocados de niños, niñas, jóvenes y adultos con discapacidad, que no asisten a instituciones, aún no tienen fecha ni respuesta sobre su vacunación.

“A quienes todavía no han vacunado es a aquellos que no están institucionalizados, que no asisten a centros de día u otros lugares. Todavía no hay fecha por eso un grupo de madres y padres autoconvocados han presentado una carta para pedir la vacuna”, dijo Ejarque.

El pedido de las familias remarca que este grupo de personas no se encuentran incluidas como población vulnerable y por lo tanto prioritaria en la planificación de la vacunación. Por este motivo, solicitaron que se “incluya en el plan de vacunación provincial al colectivo de las personas con discapacidad evitando de esta forma generar mayor padecimiento a dicha población”.

Por otro lado, también exigieron que se incorpore en el esquema de vacunación a los cuidadores directos de los niños, niñas y adolescentes con discapacidad, ya que presentan una posibilidad de contagio a través de sus padres/madres o cuidadores que estén expuestos al virus.

“Hay que rescatar que la gestión se hizo con un grupo grande de instituciones y en líneas generales ha sido muy buena. Pero considero que sería mejor que sea la misma provincia la que salga a vacunar y no las instituciones las que hagan el pedido. Aún faltan muchos porque las personas con discapacidad son un 13 % del total aproximadamente”, comentó Ejarque.

Hasta el momento, de unas 128 mil personas con discapacidad en Mendoza (según datos provinciales 2019), fueron vacunadas 2.200, es decir, un 1,71 % del total. En este sentido, el Instituto Thadi, una asociación civil sin fines de lucro que busca acompañar el proyecto de vida de las personas con discapacidad garantizando sus derechos, fue parte del inicio de la vacunación.

“El Hogar de Thadi, que incluye a los residentes y personal ya han sido vacunados con la primera dosis. En relación a los servicios ambulatorios (centros de día y CET) el ministerio nos ha solicitado las listas de las PCD y del personal y a algunas instituciones ya las han llamado para retirar las vacunas. Nos han dicho que la semana próxima o la que viene ya podremos disponer de las mismas”, expresó la directora del Centro de Día, Perla Irene Rinaldini.

“Es muy importante para nosotros poder contar con nuestra población y personal vacunados. Eso nos va a dar una gran seguridad en las actividades que realizamos y les permitiría a los concurrentes poder volver presencial a las actividades”, concluyó.

discapacidad, mendoza, vacunas, covid, inmunización, personas con discapacidad, datos, san luis, neuquén, grupos prioritarios,