Varón bonito es el que cuestiona sus privilegios

Cuáles son los espacios de los hombres en la lucha contra las violencias machistas y la desigualdad entre géneros. Qué desafíos enfrentan las masculinidades en la era del feminismo.

Varón bonito es el que cuestiona sus privilegios

Sociedad

Violencia de género

Unidiversidad

Julia López

Publicado el 30 DE DICIEMBRE DE 2019

Sabemos que los feminismos nuclean a mujeres, lesbianas, trans e identidades no binarias. Sobran ejemplos: movilizaciones, encuentros, talleres, organizaciones sociales. Pero cuando desde estos espacios comenzaron a visibilizarse las violencias machistas, muchos hombres se sintieron interpelados y empezaron a cuestionarse cuál era su lugar en la problemática.

Así surgieron grupos para hablar de la masculinidad hegemónica, sus consecuencias y también sus alternativas. Les llaman talleres de “varones antipatriarcales” o de “nuevas masculinidades” y los habilitan a cuestionarse por qué los hombres no lloran, no abrazan a sus amigos, no se dicen “te quiero”. También con qué privilegios cuentan y cuáles son sus responsabilidades en la construcción de un mundo más justo. Y, en general, cómo fueron educados, qué prácticas de poder reproducen y cómo pueden modificarlas.

Un ejemplo es el proyecto “Enfoque Integral en género, generación, masculinidades y poder”, de la Fundación Ecuménica de Cuyo. Allí confluyen varones que buscan una instancia de formación pero sobre todo de reflexión acerca de las masculinidades: qué les enseñaron, qué se espera de ellos, qué otras formas hay de ser varones.

La propuesta de este espacio es trabajar el cuidado entre varones, pero no en una lógica de cuidado romántico sino responsable. Según contó Gonzalo Arcos, integrante de este espacio, procuran construir “relaciones que no sean regidas por la corporación machista o ‘la cofradía’ (…) sino interpelarnos, marcarnos cuando vemos que algo del compañero no está bueno y también tener la posibilidad de compartir dudas e incertidumbres”.

Tienen varios ejes de trabajo en los cuales importa tanto el contenido como el modo. Por ejemplo, hacen cosas en grupo o con el cuerpo, según contó Arcos. “El grupo como una instancia en la cual poder compartir con los demás lo que le pasa a uno y que el grupo pueda darle un acompañamiento o marcar algunas cosas que uno no está viendo”. Y el cuerpo porque “los varones caen en racionalizar y pasar todo por la cabeza y son cancheros manejando el discurso. Pero a la hora de las prácticas, tienden a ser más torpes o no pueden cambiar las cosas”.

Trabajo con escuelas de la Universidad

Luego de la conocida ola de escraches de abusos en redes, las tensiones seguían ‒y seguían también compartiendo aula la denunciante con el denunciado‒. Los servicios de orientación no tenían las herramientas para abordar estos temas, las mujeres se organizaron en comisiones y los varones se quedaron sin un espacio para charlar, debatir, reflexionar. Esta fue la razón para que el proyecto de nuevas masculinidades se replicara durante 2019 en escuelas de la UNCuyo: Magisterio, CUC, Martín Zapata.

Desde lo vivencial, y en menor medida desde lo teórico, trabajan la afectividad, el consentimiento y el límite. Buscan interpelarse de manera cuidada y no desde la sanción o el reto. Los estudiantes intentan “empezar a registrar cuándo hay un ‘no’ antes de que haya un ‘no’explícito: un ‘no’ en lo gestual, en lo corporal… empezar a percibir sutilezas que los varones no estamos acostumbrados a interpretar”.

Foto: http://colectivovaronesantipatriarcales.blogspot.com/

En estos espacios, aseguró Gonzalo Arcos, “se habla de los varones y de su relación con las mujeres, pero no se habla de las mujeres”. Demuestra un sano distanciamiento de la idea de que a los varones les afecta el patriarcado del mismo modo que a las mujeres.

 “Vemos que está esa posibilidad de construir un modo de relación más sano, en donde se corra el modelo de la masculinidad hegemónica como modelo único para relacionarnos entre varones, con las pibas, con docentes, con padres y familias”, concluyó Arcos.

 

sociedad, masculinidad, hombres, violencia, machista, feminismo, mendoza, diciembre, 2019,