Vivo: el Senado decide si Dilma debe abandonar el poder

Si la Cámara Alta vota a favor del impeachment, la presidenta deberá apartarse del gobierno por seis meses. Si así fuera, la administración quedaría en manos del vicepresidente y opositor de centroderecha, Michel Temer, quien presentará su propio proyecto, resistido por "golpista" con centenares de piquetes en Brasil.

Vivo: el Senado decide si Dilma debe abandonar el poder

Dilma Rousseff, presidenta de Brasil. Foto publicada por Gaceta Mercantil.

Internacionales

Crisis política en Brasil

Unidiversidad

Unidiversidad / Fuentes: Télam y La Nación

Publicado el 11 DE MAYO DE 2016

Este miércoles 11 de mayo de 2016 es un día histórico para Brasil: el Senado decidirá si suspende o no a la presidenta Dilma Rousseff de su cargo por hasta 180 días. Se estimaba que la sesión comenzara a las 9.00, pero se atrasó. Cada senador tendrá 15 minutos para hablar. Anunciaron que la jornada podría durar más de 20 horas. Así podrían finalizar los 13 años de gobiernos del Partido de los Trabajadores, iniciados con Luiz Inácio Lula da Silva en 2003.

A Rousseff, que está acusada de haber cometido un "delito de responsabilidad" por haber maquillado las cuentas públicas y haber ocultado el déficit en el presupuesto, los números le juegan en contra: todas las encuestas indican que por lo menos 50 diputados votarán a favor del impeachment. Son necesarios 41 votos de un total de 81 senadores para que la Presidenta se vea obligada a abandonar el Palacio del Planalto y asuma –de forma interina– el vicepresidente Michel Temer, a partir del momento en que Dilma queda notificada y hasta que el Senado dicte la sentencia final.

El gobierno trató ayer hasta último momento de evitar el impeachment y, en un intento casi desesperado, le pidió a la Corte Suprema de Brasil que anule el juicio político. Cuando faltaban menos de 24 horas para que comenzara la votación en el Senado, la Abogacía General de la Unión, que defiende a Rousseff, aseguró que el proceso debería quedar anulado ya que el origen del pedido de impeachment está motivado por una venganza personal del suspendido presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, que fue separado de su cargo la semana pasada acusado de corrupción y de obstrucción a la justicia.

Cunha le dio luz verde al pedido de destitución de la presidenta en diciembre pasado, poco tiempo después de que parlamentarios del oficialista Partido de los Trabajadores (PT) votaron a favor de abrir una investigación por corrupción contra el ahora destituido diputado.

Pero el pedido que el Gobierno hizo ayer ante la Corte Suprema no fue el único intento de frenar el impeachment que hubo en los últimos días. El lunes 9, el presidente interino de la Cámara de Diputados, Waldir Maranhao, que asumió en lugar del suspendido Cunha, decidió anular la votación del pasado 17 de abril en la Cámara Baja que aprobó el pedido de juicio político, pero la medida no prosperó y el mismo Maranhao, dejando en evidencia la fragilidad de los políticos en Brasil, dio marcha atrás y revocó su propia decisión.

 

Seguí en vivo la sesión del Senado brasileño:

 

 

En el que pudo haber sido su último discurso como presidenta, Rousseff dijo estar cansada de "los desleales y traidores" pero no de luchar. La mandataria, que se sabe ya vació los cajones de su oficina del Planalto, se mostró activa estos últimos días y participó de una conferencia sobre políticas para mujeres, donde aprovechó para reforzar la tesis que defienden desde el gobierno de que es víctima de un "golpe".

La Presidenta afirmó que renunciar no está en sus planes y volvió a tildar a Temer de "conspirador" y "golpista". De aprobarse el juicio político, el vicepresidente, del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), antiguo aliado y hoy archienemigo de Rousseff, podría convertirse a partir de mañana, jueves 12, en presidente interino, mientras los senadores juzgan durante un plazo de máximo de 180 días si la presidenta cometió o no un "delito de responsabilidad".

Si la encuentran culpable, Temer finalizará su mandato hasta 2018 y Rousseff pasará a la historia junto al destituido expresidente Fernando Collor, que en 1992 fue también sometido a un juicio político. Collor, que actualmente es senador por el estado de Alagoas, votará en la sesión de hoy.
 

El futuro de Brasil

De quedar finalmente apartada del poder, Dilma pasará su exilio político en el Palacio da Alvorada, la residencia oficial de la presidencia, mientras Temer intentará afianzarse en su mandato interino y tratará de volver a ganar la confianza de los inversores, para poner al país otra vez en el camino del crecimiento y sacar a Brasil de la profunda crisis política y económica en la que está sumergido.

Los simpatizantes del Gobierno, convocados por el Frente Brasil Popular que agrupa a varios movimientos sociales, hicieron ayer protestas en todo Brasil en contra del impeachment y de lo que consideran un "golpe". Está previsto que las grandes manifestaciones de hoy sean en Brasilia, frente al Senado, lugar en el que estiman juntar cerca de 10 mil personas. Los grupos a favor del juicio político también planean realizar manifestaciones en la capital, aunque serán menores que las registradas en abril, cuando la Cámara de Diputados votó a favor de la apertura del impeachment.

Si se cumplen las previsiones, caerá el proyecto desarrollista con inclusión social que marcó a fuego a un Brasil emergente como séptima economía mundial en el siglo XXI, en medio de una crisis gigantesca de corrupción, de falta de articulación política y de una recesión económica que ha devorado cinco millones de empleos en los últimos doce meses. 

El juicio político fue presentado por el Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), que perdió las elecciones con Aecio Neves como candidato ante Dilma, reelecta por dos puntos de diferencia en octubre de 2014, y abierto por el comandante de la crisis, el presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, del Partido del Movimiento de la Democracia Brasileña (PMDB) del vicepresidente Temer y de Calheiros. La inminencia de un posible gobierno de Temer contó este martes 10 con piquetes en rutas y avenidas de 17 estados, con banderas de "Temer Golpista".

La sesión en vivo