El Canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, argumentó que de llevar el caso a instancias judiciales internacionales, su resolución podría tardar años. “Es por ello que no negamos la posibilidad de un acuerdo bilateral para resolver el conflicto”, acotó.

El ministro de Relaciones Exteriores de Ecuador, Ricardo Patiño, destacó el miércoles 26 de septiembre, que su país no descarta llevar el caso de Julian Assange ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), aunque su Gobierno optara primero por agotar todas las instancias diplomáticas para garantizar la integridad física del periodista australiano y fundador de Wikileaks.

"Si después de un tiempo razonable los diálogos políticos y diplomáticos no avanzan, no nos quedará otra alternativa que recurrir a las instancias judiciales, me refiero a la Corte Internacional de Justicia de La Haya", afirmó Patiño desde Nueva York, a la agencia EFE.

El Canciller ecuatoriano se encuentra en Estados Unidos participando en el 67° período de sesiones de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), y tiene previsto reunirse este jueves con su homólogo británico, William Hague, para analizar el caso Assange.

Patiño reiteró que la administración del presidente Rafael Correa "no fijará plazos" para resolver el asunto vía diplomática. "No queremos ponernos una camisa de fuerza, ni hablar de semanas o meses, porque esperamos que los diálogos sean constructivos y nos permitan avizorar una solución", precisó.

El Canciller argumentó que de llevar el caso ante instancias judiciales internacionales, su resolución podría tardar años. “Es por ello que no negamos la posibilidad de un acuerdo bilateral para resolver el conflicto”, acotó.

Recordó que, de momento, la única propuesta que presentan al Reino Unido es la de conceder un salvoconducto a Assange, refugiado en la Embajada ecuatoriana en Londres desde hace tres meses, para que éste pueda trasladarse hasta suelo suramericano.

"No tienen otra alternativa. Qué quieren, ¿que el señor Assange esté quince años confinado en nuestra sede diplomática? Eso sería un atentado indeseable a los derechos de un ser humano a vivir en libertad", advirtió.

También recordó al Gobierno británico que está "desgastando innecesariamente la imagen de su país”, ya que ni siquiera "un dictador latinoamericano se atrevió a poner en duda la figura del asilo político".

Añadió que se fundamentarán en un acuerdo de extradición vigente entre ambos países desde 1880, exigiendo una vez más a Londres que “respete la decisión de un estado soberano y le otorgue el salvoconducto” a Assange.

Quito ha solicitado un salvoconducto para que Assange pueda salir sin problemas de su Embajada, bajo la figura de asilo político y así viajar hasta Ecuador. Sin embargo, el Reino Unido asegura que lo detendrá porque “tiene la obligación de extraditarle a Suecia”.

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