A menos de una semana de que comience el mes más corto del año, febrero, el país trasandino es el sitio predilecto de los argentinos, a pesar de que el dólar llegó a su máximo histórico: cotiza a $ 20,20, mientras que la moneda trasandina vale $ 37 argentinos cada $ 1000 chilenos. Con estos números, los turistas deberán recalcular sus gastos con un incremento que ronda el 18 % respecto al primer día de diciembre del año pasado, fecha en que los argentinos comienzan a debatir sobre su destino turístico. En ese momento, la moneda norteamericana se conseguía a $ 17,68 y el chileno, a $ 30,15, siempre según pizarras locales.

Pese al aumento en la cotización del dólar, varias agencias de turismos de Mendoza sostienen que hubo un repunte de los destinos marplatenses. “La gente comenzó  a  elegir las costas argentinas como medios para vacacionar frente a las costas chilenas, todo ante la suba del dólar de estos últimos días”. Pero además afirman que se sigue eligiendo las costas chilenas como un medio para hacer compras. “Hoy por hoy Villa Gesell o San Bernardo no se están vendiendo por el costo alto”, afirman desde  DyD Turismo.

Con respecto al norte del país y la Patagonia, son destinos poco frecuentes del veraneante mendocino, ya que los costos son elevados en ambas partes. Gisela, encargada de las reservas de HyT Turismo informó, que lo que sale más hoy es Mar del Plata respecto de Córdoba, el norte argentino y demás zonas turísticas del país, pero que Chile es la vedette del momento por sus compras y la diferencia cambiaria. Cata Turismo alega que son muchos los destinos que hoy por hoy salen a chile, muchos también a las playas argentinas al igual que brasil, pero el país trasndino es el "boom" de la temporada, algunos por compras otros por vacaciones. "Hoy sale mucho lo de chile, son vacaciones cortas pero la gente sale, viaja" argumentan desde la agencia.

Por su parte, Sergio Sanchez, de la Asociacion Mendocina de Viajes y Turismo, afirmó que el destino turistico preferido de los mendocinos es la costa chilena, ante todo por la diferencia cambiaria. "La gente  que decide viajar a Chile alquila una cabaña o un departamento y listo, hay muy buenas opciones. Además, muchos optan por viajar en autos propios y no en colectivos, las horas de espera son mucho menores y  la gente prefiere eso". Tambien afirma Sánchez  que las costas argentinas son destinos consultados por los veraneantes, pero que son pocos los que toman la iniciativa de hacerlo. Hoy la vedette sigue siendo Chile para el 50 % de los veraneantes mendocinos".

El combustible tampoco ayuda

El escenario alcista no termina acá, afirman desde Diario Los Andes. Además hay que incorporar las subas en el combustible. Desde el 1.º de diciembre hubo dos subas, del 6 % y el 4 % en promedio. Así, por ejemplo, el litro de nafta Súper en YPF pasó de $ 22,09 a $ 24,36.

En combustible son 407 los kilómetros que separan Mendoza de Viña del Mar, cruzando por el Paso Internacional Cristo Redentor. Tomando como referencia el consumo promedio de un auto estándar chico (8 litros cada 100 kilómetros), se necesitan 33 litros de nafta para llegar a las playas de Viña. En diciembre esto costaba $ 728 y ahora hay que desembolsar $ 803 para comprar los mismos litros.  Esto es solo de ida. Para la vuelta hay que recargar en expendedoras chilenas. Según datos del Sistema de información online de precios de combustibles en estaciones de servicio de Chile, el litro de Súper se consigue en una estación Copec a $ 790 CLP.

Al cambio de los primeros días de diciembre ($ 30,15 cada 1000 CLP) eran $ 24,88; con la devaluación de esta semana, este precio ascendió a $ 29,23. Los 33 litros del regreso costaban entonces $ 821, contra los $ 964 actuales.

En cuanto al hospedaje, un departamento en Viña para 4 personas ronda los $ 50 000 CLP ($ 1575 el día y $ 11 025 la semana al convertirlo a la cotización del 1.º de diciembre). Con la reciente devaluación, esto ascendió a $ 1850 el día y a $ 12 950 la semana. Una suba de 17,46 % en solo dos meses. A eso debemos incorporarle la comida: una pareja y sus dos hijos tendrá que pensar en un gasto mínimo de $ 14 000 CLP para sentarse a almorzar o cenar en un restó chileno. En diciembre, esto representaba un gasto de $ 422. Para febrero, este “gustito" se incrementó hasta llegar a los $ 518. Es decir, el 22,74 % de incremento.

A las costas chilenas, ¿llevo dólares, pesos o tarjetas?

Los especialistas sugieren conformar una suerte de mix entre uso de tarjetas y de dólares en el destino, de manera de conseguir el mejor cambio y operar de manera cómoda y segura.

Dólares. Se sugiere siempre llevar –al menos– algo de dólares (o de la moneda del país de destino) en el viaje. Siempre se presentan gastos iniciales, como el pago de peajes (si se viaja en el propio auto) o pagos menores, como una comida en viaje. Pese a la devaluación del peso argentino, sigue conviniendo cambiar dólares por pesos chilenos en tierras trasandinas. Por $ 1000, en Mendoza nos dan $ 27.000 CLP. En cambio, si esos $ 1000 se convierten en Mendoza en dólares (USD 49,50) y los volvemos cambiar en Chile por moneda local, conseguiremos $ 29 455 CLP.

Moneda local. Es una buena opción, siempre que se la haya comprado en Argentina a una buena cotización. Hay que hacer cuentas y decidir qué conviene más.

Mejor el débito. Sin embargo, la opción más conveniente es utilizar en Chile la tarjeta de débito. Cuando hacemos una compra en el extranjero, el monto en moneda local se pasa a dólar y se debita ese importe en divisa estadounidense a la cotización oficial ($ 19,80 en el Banco Nación). Entonces estaríamos pagando $ 32,70 cada $ 1000 CLP, muy por debajo de lo que exhiben las pizarras mendocinas.