El Poder Ejecutivo firmó, ayer miércoles 6, el Decreto 368/2017, por el cual el Consejo Nacional de las Mujeres, que funcionaba en el área de Presidencia de la Nación, fue reemplazado por el Instituto Nacional de las Mujeres (INAM) dentro de la estructura del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, como un organismo descentralizado. 

En diálogo con Dale!, María Elena Barbagelata, dirigente socialista y especialista en cuestiones de género, consideró que "si se reemplaza el Consejo Nacional de la Mujer (CNM), debería conformarse un organismo con autonomía funcional y autarquía, dependiente directamente de Presidencia de la Nación, y que forme parte del Gabinete".

Y amplió: "como primer análisis es un paso positivo puesto que se habla de una Dirección Ejecutiva de un instituto nacional con rango de secretaría. Se trasladará la estructura y su presupuesto del Consejo a este instituto".

"El CNM es un órgano que coordina e implementa políticas para la violencia contra la mujer. Sin embargo, hay una deuda con la mujer en los ámbitos institucionales. Esto está relacionado con muchos otros derechos humanos de la mujer que se interrelacionan entre sí. Pedimos que se dupliquen los 700 millones que se le habían asignado. Si actualmente hoy se asignan 1200 millones a la propaganda oficial, entonces tiene que haber una reformulación de estos fondos", explicó Barbagelata.

"También se habla de descentralización y en este sentido, la autonomía me parece saludable. No obstante, también es una oportunidad de discutir la jerarquización de políticas de igualdad. Una de las batallas de igualdad son los planes transversales a todos los ministerios. Los avances están asociados a una voluntad política comprometida por la igualdad; la igualdad no es fácil ni puede ser una medida unilateral porque se pelea contra años de patriarcado", concluyó.