A través del programa Pegasus se pueden ver contactos, calendarios, correos, activar la cámara de manera remota e incluso ver qué teclas de un teléfono celular son presionadas. Este software ha sido usado para espiar a periodistas, activistas y defensores de derechos humanos en México y a políticos de la oposición de ese país, es decir, del Partido Acción Nacional (PAN).

El dirigente del PAN y posible candidato presidencial para las elecciones del próximo año, Ricardo Anaya; el expresidente del Senado de México, Roberto Gil Zuarth, y el vocero de la dirigencia del partido, Fernando Rodríguez Doval, recibieron mensajes de texto similares en el verano de 2016. Esos SMS los invitaban a darle clic a un vínculo para revisar una noticia que presuntamente perjudicaba a la imagen del PAN.

Según The New York Times, el programa solo puede ser adquirido por gobiernos e instalado por NSO Group, el fabricante de Pegasus, que sólo instala en las agencias gubernamentales. En el caso de México, está documentado que la Procuraduría General de la República, el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (la agencia de inteligencia) y la Secretaría de la Defensa Nacional habrían pagado alrededor de 80 millones de dólares al grupo fabricante de este dispositivo de espionaje.

En un comunicado citado en el portal de noticias mencionado, Anaya consideró "inaceptable" que el teléfono de integrantes del PAN haya pretendido ser infectado por un programa cuya licencia sólo puede adquirir el gobierno para "combatir la delincuencia organizada” y repudió el hecho de que el gobierno espíe e invada la intimidad de las personas en una magnitud semejante. “No vamos a descansar hasta que los responsables renuncien a sus cargos, sean procesados y encarcelados”, sentenció el exfuncionario.