Es un propulsor de la tolerancia cero
para el delito desde que empezó su actividad política, y no lo esconde. Sus proyectos, si
llega al Congreso como pretende, serán en esa línea, como lo son desde hace diez años en la Legislatura local. Daniel Cassia es el
candidato a diputado nacional en primer término por Compromiso
Federal, el partido del ex gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez
Saá. Crítico del Gobierno nacional y en consonancia con el puntano,
Cassia propone que Mendoza deje de depender de la Nación para realizar obras. No quiere despenalizar la marihuana ni el aborto, ni
está de acuerdo con la ley de Cupo femenino. Sus explicaciones. Es la primera de una serie de entrevistas a los candidatos que encabezan las listas provinciales para acceder al Congreso que por estos días presentará Edición UNCUYO.
Daniel Cassia. Foto: Axel Lloret
¿Cuál será el primer proyecto que
usted presentará si llega al Congreso?
El primer proyecto que presentaré es
uno para limitar las excarcelaciones a la tenencia y portación de
armas ilegales, porque hoy es un delito excarcelable. Esto
depende del Congreso a nivel nacional.
¿Cree que tendría consenso?
Calculo que sí. En la provincia de
Buenos Aires sé que muchos piensan de ese modo; en Córdoba, también.
¿Y qué beneficios tiene ese
proyecto? ¿No piensa que habrá más personas presas?
No: menos armas en la calle y más
personas esperando el juicio oral detenidas. ¿Cómo explicás que
circulás por la calle con un arma ilegal? No se encuentra explicación
lógica. Hoy es ilegal, te detienen, te imputan, te procesan, pero
todo este proceso lo pasás en libertad.
¿Hay que bajar la edad de
imputabilidad de los menores?
Sí, pero primero hay que crear un
régimen penal juvenil acorde a cada situación. Demoler todo lo que
son ideas y hasta los inmuebles que hay en Mendoza. Hay que armar un
sistema que mezcle reinserción con estudio y deporte, que puede
hacerse desde un servicio cívico, social, obligatorio. Si hablamos
de Mendoza, puede concretarse en inmuebles que hoy están disponibles
en el Ministerio de Defensa, como Campo de Mayo o Uspallata. También
hay que acompañar con la creación de un régimen de detección que
vea la problemática intrafamiliar. El problema hoy es que a un
menor, por un tema simple, lo llevan al ex Cose y termina con una
universidad del delito. Hay que invertir. Este abordaje hay que
hacerlo desde que se empieza la vida social. No concibo que un menor
que mate una persona tenga un derecho.
¿Qué reforma considera que hay que
hacer en la justicia, más allá del tema delictual?
Lo que hay que hacer es generar los
presupuestos suficientes para incorporar tecnología y humanizar a la
justicia a través de los juicios por jurado. Hacer una justicia más
dinámica, con códigos procesales penales que favorezcan a las
víctimas del delito, a la gente honesta. Limitar algunos institutos
como el juicio abreviado, con el que existe un abuso. Un juicio
abreviado por un tema correccional, un tema menor que implique una
pena sustitutiva me parece bárbaro, pero hay que unificar criterios
en la unificación básica que es la contravencional.
En Mendoza está la mitad de la
justicia sin informatizar, se levantan las denuncias a mano. Por ahí
dicen que quieren los patrulleros con tecnología, cuando hace diez
años que están en San Juan. No hay un registro único de delito.
¿Piensa que la ciudadanía debe
elegir algunos miembros del Consejo de la Magistratura, como propone
el Gobierno Nacional?
Hay que despolitizarlo absolutamente;
si no, estamos en un círculo vicioso. Lo que quieren hacer es
politizarlo más. Habrá justicia para los amigos, para los
empresarios fuertes, y quien no tenga relaciones, alpiste, perdiste.
¿Cómo queda Mendoza dentro del
reparto de fondos del presupuesto nacional?
Totalmente relegada. Estamos dentro de
las cuatro provincias más relegadas, con la diferencia de que el resto
de estas provincias son antikirchneristas y según [el gobernador de
Mendoza, Francisco] Pérez, nosotros somos ultra K. ¿Y cuáles han sido
las consecuencias de rendirle honores a la señora
Presidenta para Mendoza? Estar relegados. El presupuesto es un dibujo. Nos dicen
que vamos a hacer tal obra, pero si conseguimos los fondos en los
organismos internacionales. La doble vía Luján-Tunuyán lleva diez
años. ¿Por qué en otras provincias se terminan las autovías, las
viviendas, los diques? Los blancos son un dibujo. Córdoba está
relegada, pero su gobernador no está alineado, Santa Fe también.
Dependemos económicamente y financieramente del humor del Gobierno
Nacional. Solo Mendoza aporta el 46% del presupuesto, el resto la
Nación, por lo tanto hemos perdido autonomía. La única manera de
que cambie es tomar decisiones políticas firmes, como reclamar a la
Nación, generar nuevas reformas. Si se reformara la Constitución
local, yo haría algo parecido a lo que hicieron en San Luis, donde
establecieron que la mitad del presupuesto sería para obras y el
resto, para gastos corrientes. Pueden hacer casas porque le ponen
plata; un ministro, cuando ingresa al Gobierno de San Luis no ingresa
con un montón de ñoquis, sino que tienen que concursar esas
personas.
¿No piensa que hay una alianza entre
los partidos políticos para que eso no cambie?
Sí, cada uno que pasa deja su
staff, esto es desde la época de las carretas. Hoy el gobernador saca un
decreto donde dice que está congelada la planta permanente, pero te
hacen contratos de locación. En algún momento hay que parar la
pelota y hacer viviendas, obras, etcétera. El hospital de Luján es uno
cuyo cartel ha recorrido más lugares, es solo un cartel. Un cartel
que dice “próximamente” y no se hace nunca.

Despenalizar
Lo hago cambiar de tema. ¿Qué piensa de
la despenalización de la marihuana?
Estoy en contra. Hace dos años
presenté un pronunciamiento en contra y la Cámara de Diputados
provincial adhirió a través de una resolución.
¿Por qué está en contra?
Creo que hay prioridades. No se puede
hablar de despenalizar el consumo de marihuana cuando en Mendoza no
existe un centro de rehabilitación. Nadie se ocupa del enfermo.
O sea que a usted le parece bien que
a un pibe que esté fumando un porro lo detengan...
No, lo que hay que hacer es el
abordaje. No se puede permitir que circule libremente. ¿Cómo medís
el pequeño consumo, la comercialización? El último decomiso grande
en Mendoza fue en Alvear hace dos semanas, porque seguían una banda
de delicuentes de electrodomésticos. No persiguen al narcotraficante
que no se droga, que es el que comercia, pero tampoco se atiende al
enfermo. No hay nada. Si se agrega un consumo indiscriminado, hay un
problema más. No estamos preparados.
¿Piensa que en Uruguay sí?
No, no va a funcionar como no
funcionó en ningún lugar del mundo con excepción de Holanda, donde
hay otra mentalidad. El caso de Argentina es grave porque el país
tiene las fronteras abiertas, no hay seguimiento radarizados, no hay
ley de derribo como en todos los países, no hay controles de
fronteras, no hay controles marítimos. Del universo de lo que
circula por Mendoza, solo el 8 por ciento es lo que se decomisa. ¿Así querés
despenalizar?
¿Qué opina de la despenalización
del aborto?
No estoy de acuerdo, estoy por
propender el derecho a la vida. Sí acepto lo que plantea el Código
Penal. Se equivocan aquellos que dicen que el protocolo del aborto es
el aborto, es una metodología. La Legislatura local debería haberse
pronunciado a favor (hace casi un año en relación al protocolo para
la atención de abortos no punibles, que la Legislatura rechazó).
Acepto lo que plantea el Código Penal hasta ahora.
¿Votaría una ley de cupo que
garantizara el 50 por ciento de mujeres en las listas?
No, a las mujeres hay que
garantizarle el 100%.
¿Pero cree que las mujeres estamos
hoy en igualdad de condiciones que los hombres en la actividad
política?
No lo sé.
Solo dos mujeres encabezan sus
listas para la Legislatura.
Porque son las que están interesadas, no
surgió naturalmente nadie que lidere. A eso no se le puede poner
cupo.
Si usted no fuera usted, ¿a quién
votaría para el Congreso?
A Alberto Montbrun (candidato por la
Coalición Cívica ARI) porque es un hombre estudioso y preparado, y
si pudiese traducir sus conocimientos en términos que la gente comprendiera, haría un descalabro. El problema es que todo su
conocimiento intelectual lo transmite de una manera que la gente no
termina de comprenderlo. Es un hombre coherente, honesto,
intelectualmente impecable. El resto es guitarra.
Desestructurado
Daniel Cassia es un hombre alejado
de las formalidades, concreto, no le gustan los rodeos. Edición UNCUYO le preguntó acerca de otras cuestiones por fuera de los temas legislativos.
Si no fuera político, ¿qué le
hubiera gustado ser?
Productor agropecuario, me gusta el
campo.
¿ Está leyendo algún libro?
Sí, uno de Luis Beldi, Los 12
apóstoles.
¿Son caros o baratos los libros en la
Argentina?
No lo veo complicado, hay de todo.
Asociación Libre
"Diga lo que le
venga a la cabeza", pidió Edición UNCUYO, haciendo uso (y abuso) de
una técnica del psicoanálisis que consiste en que quien está siendo
analizado exprese sus ideas, ocurrencias, sin selección.
Escuela.
Formación.
Fútbol.
Diversión.
Tolerancia.
Modo de vida.
Los 90.
Un proceso ampliamente
apoyado por la sociedad... y por todo el peronismo.
Banca.
Responsabilidad.
Padre.
Amor, cariño, guía.
¿Quién es Cassia?
Es un abogado y dirigente del peronismo
de Luján de Cuyo, que heredó la militancia peronista de su padre y
de su abuelo (referentes del sindicato de Petroleros). Antonio
Cassia, su padre, fue aliado del expresidente Carlos Menem, pero hoy
tiene muy buenas relaciones con la Nación. Entre 2003 y 2007, Daniel Cassia fue
senador provincial. Muy crítico de la Concertación (la alianza que
hizo el expresidente Néstor Kirchner con los radicales) se mantuvo
en las filas del PJ local hasta que, en 2008, se acercó al Peronismo
disidente, siendo clave en su formación en la provincia. Desde 2007
es diputado provincial y, como se ha especializado en Seguridad, ha
presentado muchos proyectos en ese sentido.