Dos proyectos “eco” de jóvenes mendocinos para seducir a la NASA

El NASA Space Apps Challenge 2019 seleccionó dos equipos de la provincia. Las iniciativas que siguen en competencia: Bio Trashwale y Vengadores de la tierra.

Dos proyectos "eco" de jóvenes mendocinos para seducir a la NASA

Foto: Julieta Vejling, miembro del equipo ganador del Nasa Space Challenge 2019

Sociedad

Medio ambiente

Unidiversidad

Unidiversidad / Ernesto Gutiérrez

Publicado el 31 DE OCTUBRE DE 2019

Como en 2018, estudiantes mendocinos representarán al país en un concurso mundial: el NASA Space Apps Challenge 2019, que patrocina la Agencia Espacial de Estados Unidos y organizó la Mars Society Argentina.

En esta séptima edición de la hackatón, los ganadores fueron estudiantes universitarios que presentaron el proyecto denominado “Bio Trashwale” (Ballena basurera) que se trata de un pequeño submarino robot, que elimina las micro y nano partículas de plástico que contaminan el mar. En segundo lugar, “Los Vengadores de la Tierra”, que trabajó en el desarrollo de un avión no tripulado que analiza la composición de la tierra y determina si el suelo es óptimo para cultivar.

El concurso se realizó entre el 17 y 20 de octubre, en el Mendoza TIC Parque Tecnológico, en simultáneo con otras ciudades del mundo, donde los jóvenes interactúan creando un espacio de creatividad y cooperación internacional.

El concurso le da a elegir a los participantes más de 25 problemáticas a solucionar, y en este caso los ganadores eligieron el problema de los parches de basura oceánica -colecciones de desechos marinos que se unen debido a las corrientes oceánicas- que tienen efectos devastadores en los ecosistemas oceánicos.

Un reto al ingenio

Primer puesto, proyecto ganador: Bio-Thrashwhale (Ballena basurera)

El equipo ganador estuvo integrado por: Luciano Lima Cabanillas, Martín Enzo Romero Valdés, Andrés Martín Aguilar Loyola, Mario Fernando Bustillo López, Julieta Jazmín Vejling y Elías Miguel Barbero Pérez.

"Nos inscribimos, fueron tres días que estuvimos en el Parque TIC. Hubo charlas y luego nos dedicamos por grupo a desarrollar la problemática que habíamos elegido. La NASA propone alrededor de 25 problemáticas y nosotros teníamos que elegir una, desarrollar la idea, solucionar el problema que nos plantearon, con todos los detalles", contó a Unidiversidad, Julieta Vejling (20) sobre el ingreso de su equipo al desafío de la NASA.

"Uno de los problemas era la contaminación de los micro plásticos en los océanos, sobre todo en el Océano Pacífico, donde se encuentra la mayor concentración de plásticos y basura. Nosotros diseñamos un submarino, que por la forma en que fue ideado, produce un proceso de filtración que va eliminando las micropartículas", explicó Julieta sobre el proyecto.

El equipo ganador estuvo integrado por: Luciano Lima Cabanillas, Martín Enzo Romero Valdés, Andrés Martín Aguilar Loyola, Mario Fernando Bustillo López, Julieta Jazmín Vejling y Elías Miguel Barbero Pérez.

Nada fue fácil en el concurso, teniendo en cuenta el poco tiempo con que cuentan los participantes para idear una solución al problema planteado. Además, el grupo ganador es bastante heterogéneo y se armó días antes de ir al TIC a concursar. "El grupo se armó por pura coincidencia. Somos dos estudiantes de ingeniería industrial en la UNCUYO. También hay un chico que estudia marketing y música, y tres chicos de distintas ramas de ingeniería que estudian en la UTN", confesó Julieta, quien agregó: "Estábamos bastante mezcladitos, y sólo algunos días antes estuvimos en contacto por teléfono, para ir organizándonos, y el jueves (17) fue el primer día donde nos encontramos todos en las charlas (TIC)".

"El viernes fue el primer día de trabajo, y arrancamos a las 9 y terminamos a las cerca de las 20, trabajando todos sobre la misma idea. Realmente pudimos armar un equipo bastante bueno", concluyó Vejling, que añadió que ahora ya están participando en la instancia internacional”.

Cómo funciona el Trashwale

El minisubmarino se maneja a control remoto, y tiene un sistema de filtrado que incluye cinco cubiertas, y es posible alcanzar la meta final de recoger los residuos contaminantes producidos por los residuos humanos. El desafío es el barrido de las zonas previamente determinadas que se guían por tecnología GPS.

“Al considerar cualquier falla en la primera de todas las cubiertas, se activará el procedimiento manual para poder encontrarlo, limpiarlo y continuar con su rutina programada. El objetivo final: limpieza del microplástico, que es dañino para nuestro medio ambiente”, detalló Julieta.

Y sumó: “La estructura del sumergible permite llevar hasta 38 kg de desechos microplásticos en el mar, esto ofrece la bio-trashwhale la necesidad de una gran variedad de sensores que se necesitan para controlar la inmersión”.

Esto redunda en eficacia al momento de supervisar la tarea sin necesidad de mucho personal. El sistema de sensores también facilitará la capacidad de ser autónomo para corregir su desviación automáticamente y evitar colisiones con objetos tales como redes de pesca, bolsas de plástico, o animales.

Segundo puesto, proyecto ganador: Vengadores de la tierra

 

El equipo segundo equipo ganador estuvo integrado por:  Abel Gonzáles, Iván Arias, Luciana Della Perriera, Gabriel Yudewitz Pohl, Gisela Griffone, Kevin Alcalde, Nicolás Paganini , Soledad Chinigioli.

"El clima en nuestro planeta cambia drásticamente, y el despreocupado uso humano de la naturaleza está teniendo consecuencias aterradoras que están amenazando la vida en la Tierra. Es por ello que nuestro equipo trabajó en el desarrollo de un avión no tripulado, al que sigue un “laboratorio móvil”, expresó Abel Gonzales.

La función de la aeronave, según detalló Abel, es escanear y capturar las características de la tierra sobre la que vuela. “El drone realiza un análisis superficial del terreno y luego el laboratorio movil análiza la composición química del suelo, saber si la huella de carbono es óptima (si no se trata de disminuirla), si esta tiene bajos índices de nitrógeno, su ph, si es bajo en sodio y demás”. La cámara incorporada al drone realiza solo un escaneo de la superficie a traves del degradado de colores que le otorga".

“Una vez que la aeronave ha detectado un área óptima para el cultivo, el vehículo que transporta el laboratorio seguirá al drone a esa área para analizar la tierra. Entonces, determinará si es posible plantar y cultivar un área verde allí. Esta solución contribuirá a reforestar muchas áreas adecuadas y desocupadas de la Tierra, buscando revertir los efectos del calentamiento global”, concluyó Gonzales.

 

 

 

 

mendoza, equipos, nasa, concurso, space, chanllenge, ballena, basurera, internacional, ,