Por qué el debate por la Hidrovía Paraná-Paraguay es clave para toda la Argentina

Se trata de una autopista fluvial fundamental para la economía y el comercio. "Todo está en manos de los europeos y los chinos", advierten.

Por qué el debate por la Hidrovía Paraná-Paraguay es clave para toda la Argentina

Referentes políticos y sociales piden la reestatización de la Hidrovía lo antes posible. Foto: Ipid

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Unidiversidad / Santiago Serrano

Publicado el 25 DE JUNIO DE 2021

La Cuenca del Plata se compone de cuatro importantes subcuencas: las de los ríos Uruguay, Paraná, Paraguay, y la propia cuenca del Río de la Plata. Tiene una extensión superior a los 3 millones de kilómetros cuadrados y reúne a las hidrovías comerciales más importantes del continente.

Entre ellas, se encuentra la Hidrovía Paraná-Paraguay, que es una especie de autopista sobre el agua que recorre y conecta los puertos del Gran Rosario con la salida al océano. Por ella pasan 2 de cada 3 dólares que ingresan al país por vía comercial.

El 30 de abril venció el contrato para tareas de limpieza y balizamiento en esta ruta comercial marítima que está a cargo de la empresa belga Jan de Nul, asociada a la local Emepa. Las autoridades nacionales no elaboraron en esos tiempos el pliego para el llamado a licitación, por lo cual extendieron la concesión a los actuales responsables por 90 días, mientras se definen las condiciones de un nuevo pliego licitatorio.

Luciano Orellano, investigador de esta problemática desde hace más de 10 años y autor del libro Argentina sangra por las barrancas del río Paraná, dialogó con Unidiversidad sobre este conflicto que tiene “más de 100 años” y tanto “mal le ha provocado al comercio y la economía” del país. El investigador aclaró cuáles son los inconvenientes puntuales que desembocaron “en esta estafa de nuestros recursos” y remarcó que es de vital importancia “recuperar la soberanía y administración de nuestros ríos” para dejar de “regalar la producción de nuestras tierras a capitales extranjeros”.

En primer lugar, Orellano contó cómo se gestó este inconveniente, que hoy es coyuntural en la agenda de los argentinos: “De la Cuenca del Plata se desprende esta gran autopista fluvial, que es una unidad económica demográfica fundamental para la región, ya que involucra a más de 129 millones de personas de Brasil, Uruguay, Argentina, Bolivia y Paraguay. Desde allí, se produce la proteína para todos los países más poblados del mundo. La unidad productiva América del Sur es de 360 millones y 170 son exportados”.

Dentro de todo ese mundo comercial marítimo, gran parte es generada por Argentina, ya que es la principal productora de soja, el principal motor de la proteína. “Un kilo de soja representa de dos kilos de carne en cuanto a proteínas, y Argentina deja el 60 % de su producción en manos europeas y asiáticas”, sumó.

 “Europa, y sobre todo Asia, con China a la cabeza, son los que se quedan la mayoría de la producción de proteína del continente. Son más de 5000 buques los que entran a la Cuenca del Plata para llevarse más del 65 % de la producción de cereales, soja y demás productos proteicos”, explicó Orellano, que es dirigente del PTP en Santa Fe.

Al respecto, el escritor santafesino remarcó que, del total de buques que ingresan a la región, “2635 llegan al Puerto de Rosario y un tercio de la cosecha argentina se va en negro hacia el exterior”. Esa situación se produce porque “no hay ningún tipo de control por parte del Estado” sino que “es Estados Unidos el que ejerce esa potestad en nuestro país”.

Orellano explicó que, sumado a toda esta situación en la que el Estado nacional no es parte, “el Estado chino se adueñó del 20 % del comercio exterior argentino en los últimos 20 años”, por lo que “la situación empeora a diario”. Enfatizó en que “es el momento de recuperar lo que nos corresponde” a todas las argentinas y los argentinos. “Desde la época del menemismo que no tenemos control del comercio, ni de los ríos, ni de la producción de nuestras tierras. En definitiva, no somos dueños de las riquezas ni de los bienes de nuestro país”, afirmó.

Por último, el autor de "Argentina sangra por las barrancas del río Paraná" invitó a todas las personas a participar de “una gran movilización en el Litoral, en Resistencia, en Santa Fe y en Rosario para hacer un abrazo simbólico al Paraná, dentro del mismo y en el puente, para intentar recuperar nuestros ríos y evitar esta continuación extranjera”.

 

Buscan crear una Comisión Bicameral para el control de la Hidrovía

Un plenario de comisiones de la Cámara de Diputados emitió el pasado martes un dictamen favorable con amplio respaldo al proyecto de ley que crea la Comisión Bicameral de Seguimiento, Control de la Licitación y Funcionamiento de la Hidrovía Paraguay-Paraná y del sistema de navegación troncal con jurisdicción en la República Argentina.

El despacho, según consignó Télam, fue respaldado por el Frente de Todos, Juntos por el Cambio y los interbloques Federal y de Unidad Federal para el Desarrollo, lo que le asegura la mayoría para ser convertido en ley. La decisión fue adoptada en un plenario de las comisiones de Peticiones, Poderes y Reglamento y de Presupuesto y Hacienda, que conducen los oficialistas Mayda Cresto y Carlos Heller, y en las cuales respaldaron este proyecto 30 legisladores y 37 en cada uno de estos grupos asesores.

 

El disparador de La Argentina sangra

El 27 de febrero de 1812, a orillas del río Paraná, Belgrano izaba por primera vez la bandera celeste y blanca, la que a partir de entonces sería símbolo de la lucha de la independencia y soberanía nacional.

Belgrano brilló como militar en innumerables batallas, pero poco se conoce de los enormes aportes del Belgrano científico, pensador , economista, político revolucionario, precursor del periodismo nacional, impulsor de la marina mercante y fundador de la Escuela Naval, que además estaba desvelado por la industria nacional y la igualdad de los hombres que habitan estas tierras.

Su legado fue una guía para esta investigación. Sus ideas llegan hasta nuestros días con inmensa actualidad y con la fuerza para terminar las tareas inconclusas.

Esas mismas barrancas que vieron enarbolar nuestra insignia patria hace más de 200 años son en la actualidad uno de los principales escenarios de explotación de suelo por parte de las potencias extranjeras. El libro de Luciano Orellano, La Argentina sangra por las barrancas del río Paraná, es el producto histórico y actual de una ardua investigación que tiene su origen en la búsqueda de las causas profundas del "saqueo de nuestra Patria". Además de autor de esta obra, Orellano es en la actualidad el vicepresidente del Partido del Trabajo y del Pueblo e integrante del Foro por la Recuperación del Río Paraná y colabora con el Frente Social y Popular, que lidera Carlos Del Frade.

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